martes, 5 de febrero de 2013

Ernesto, carpintero-pedagogo preocupado por jóvenes


Alejandro Esquivel C. / alesquivelc@hotmail.com


Ciudadanos preocupados por el problema también opinan. Ernesto Martínez indica que las escuelas de Artes y Oficios son una buena manera de ocupar a los jóvenes en proyectos que pueden buscar los gobiernos conjuntamente con la iniciativa privada.
Y puso como ejemplo la escuela de Artes y Oficios en la Delegación Xochimilco, en la capital del país, ubicada en un terreno de 10 hectáreas y en donde existe una oferta de 70 carreras. Entre ellas están la de hojalatero, mecánico, plomero, cerrajero, carpintero, herrería, electricista, diseño gráfico, dibujo industrial, técnico en computadoras, canto, estética, escultura, dibujo artístico y otras.
“Las carreras tienen una duración de dos años y los alumnos ingresan teniendo los estudios de secundaria y lo mismo se podría hacer aquí en Tabasco, pero bien hecho, sin corrupción ni tranzas como las de Andrés Granier, Betty Luque, Héctor López y muchos más que se menciona que se llevaron hasta las llantas de los carros, dicen”, expresa entre risas.
Por otra parte, explica, todos tienen que cursar las materias de educación cívica y ética, y educación emocional, así como programación neurolingüística, gimnasia cerebral, aprendizaje acelerado, técnicas de estudio, comunicación, creatividad, proyecto de vida, liderazgo y la materia de emprendedores, destaca.
Pareciera aburrido, pero no lo es, indica don Ernesto, quien explica que todas las materias tienen un enfoque diferente; “por ejemplo, educación cívica y ética no es el programa tradicional en que se le recitan las principales leyes de nuestra Constitución, sino es un programa en el que se establece un diálogo entre el maestro y los alumnos acerca de la vida personal y social de los alumnos. Juntos hacen la reflexión acerca de la vida cotidiana y como se tratan de cuestiones personales de los alumnos, se pone muy interesante, todo termina siendo muy significativo para los alumnos”.
Excelente carpintero, con la lucidez que hace falta a muchos pedagogos, el entrevistado manifiesta que la educación emocional trata de cómo nos encontramos, “y es la búsqueda de estar en las mejores condiciones desde el punto de vista emocional, porque es mediante éstas con las que realmente nos movemos, independientemente de las situaciones económicas en que nos encontremos”.
Y va más allá al decir que una persona puede tener mucho conocimiento, pero si emocionalmente se encuentra muy por abajo, esa persona no va a hacer algo significativo en la vida. En cambio, si uno se encuentra por arriba del promedio en el aspecto emocional y no tiene el conocimiento adecuado, la misma emoción hará que la información la obtenga muy rápido.
Luego de relatar que él mismo estudió en una escuela de Artes y Oficios, “porque era de lo peor y solamente ahí pude desahogar y canalizar toda mi energía negativa”, indica que la institución cuenta con un departamento de tutores que tienen la capacidad para detectar las necesidades de cada uno de los estudiantes y ellos le recomiendan al estudiante que curse tal o cual materia para cubrir sus necesidades personales.
Emocionado, hace notar que la escuela tiene un departamento de enlace social, el cual tiene el propósito de buscar las opciones de trabajo para los egresados de la institución, “pero no sólo le ayuda a colocarse en un trabajo, sino que le da seguimiento a cada uno de los egresados hasta un periodo de dos años”. 
Hay otro departamento: investigación y diseño curricular. Este departamento tiene la función de establecer un enlace con la sociedad para ver cuáles son las necesidades de la población para crear las nuevas carreras que se requieren y de esa manera no haya egresados sin empleo, dice entre ‘cerruchadas’ y ‘martilleo’.
Manifiesta que en esta institución no puede faltar el departamento de comunicación social, el cual tiene la función de tener al tanto a toda la comunidad de la información que se genera dentro de la institución y al mismo tiempo se encarga de tener la información para toda la población mediante los medios de comunicación.
Y mientras aplica barniz a un trinchador que está por entregar, expresa que el otro departamento importante es el de fomento de actividades deportivas, es de vital importancia que mediante estas actividades se crea el sentido de pertenencia, se aprende a luchar por un objetivo, se eleva la autoestima de todos los estudiantes y se aprende a relacionar con los demás.
La característica única de esta institución es que tiene los talleres para cada escuela en la cual se hacen los trabajos para el público en general; ofrecen precios accesibles de tal manera que todos ganan: los estudiantes, la institución y los clientes, concluye don Ernesto, quien más que a la carpintería podría dedicarse a la academia, ya que cuenta con más lucidez que muchos maestros conocidos.  

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