Quien sólo gobierna por encuestas es un demagogo; quien no las utiliza encuestas para saber qué es lo que está sucediendo en una sociedad es un autoritario, sostiene el politólogo
Luis Enrique Martínez / luisenriquemarh@hotmail.com
En medio de la contradicción sobre la utilización de las encuestas que indistintamente convierten al ciudadano en demagogo y al gobernante en autoritario, Federico Reyes Heroles sostiene que la construcción de la democracia en el país pasa por la observación del comportamiento ciudadano que alienta la alternancia política como la que estrenará Tabasco en enero de 2013 y no a los partidos políticos que “no leen” la demanda de los gobernados.
“Hay que pensar en la fuerza de la inteligencia social”, dice en entrevista el escritor, politólogo, editor y humanista que el 12 de noviembre fuera galardonado con el Premio Nacional Malinalli 2012 que otorga la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco (UJAT) a quienes contribuyen “al enriquecimiento de nuestra cultura” mexicana y universal.
El autor de cuatro obras de ficción y 12 de no ficción que nació el 7 de enero de 1955 en la Ciudad de México, realizó sus primeros estudios en el Colegio Alemán “Alexander Von Humboldt” y, posteriormente, cursó las licenciaturas de Ciencias Políticas y Derecho en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM); de ésta última fue catedrático por 20 años enseñando el pensamiento de Isaiah Berlín, Karl Popper, Elías Canetti, Norberto Elias, entre otros más.
Columnistas en distintos momentos de los diarios de circulación nacional Unomásuno, La Jornada, El Financiero y Reforma (en este último escribe desde 1993), Reyes Heroles —uno de los hijos de don Jesús Reyes Heroles, último intelectual del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y autor de la reforma electoral de 1977— fundó la revista Este País, que fue una de las publicaciones pioneras en las encuestas de opinión, estadísticas sobre asuntos sociales y prospectiva.
El Premio Nacional Malinalli 2012 que recibió de manos del rector José Manuel Piña Gutiérrez, se suma a las once distinciones anteriores que el también colaborador periodístico de radio y televisión ha recibido a lo largo de su trayectoria profesional por instituciones nacionales e internacionales como la Unicef.
Con tales reconocimientos, Reyes Heroles concedió la breve entrevista que recordó la informal conversación sostenida a mediados de 1990 cuando ofreció una conferencia a petición de la Coordinadora de Trabajadores de la Comunicación en Lucha por la Democracia (Cotracolude), que en ese año presidía el reportero Eduardo Salinas Pérez. En aquella ocasión lo acompañó en la mesa del restaurante de Manuel Morales Vidal el también periodista René Delgado, actual editorialista del diario Reforma.
“Hay que pensar en la fuerza de la inteligencia social”, repite para luego aclarar que aunque esa tarea recae en la comunidad intelectual, la realidad consiste en pensar “cómo podemos impulsar a todos esos mexicanos que andan por ahí que, probablemente, tengan mayor potencialidades (de coeficiente intelectual) que cualquiera de nosotros”.
—A partir del 1 de enero de 2013 inicia la alternancia política en Tabasco tras 83 años del PRI en el Poder Ejecutivo estatal. La experiencia federal de 12 años y de otras entidades donde la oposición ha sido gobierno no es favorable a las expectativas ciudadanas —se le pregunta.
“No generalizaría. Creo que ha habido gobiernos que sí han sido, digamos, aceptados por la población y que, incluso, han sido ratificados. Por ejemplo, el Partido de la Revolución Democrática gobernó 18 años en Michoacán y ahora lo condenaron (en la elección de julio de 2012).
“Pero creo que lo importante es ver que la alternancia se ha instalado en la mente de los mexicanos y que están observando cada vez más a los gobiernos. Y los miden de acuerdo a sus resultados.
“El Partido Acción Nacional gobernó durante 12 años en el estado de Morelos y a los 12 años lo sacaron, y entró una nueva opción que es la del partido (PRD) que llevaba años deseando ser gobierno.
“Creo que eso es alentador. Más que a los partidos hay que observar a la ciudadanía. La democracia no está hecha para terminar con los partidos. Está hecha para que haya procesos de relevos sistemáticos y que se vayan perfeccionando las acciones de gobierno.
“Creo que eso está ocurriendo lentamente en el país. No hay marcha atrás. Básicamente lo que el mexicano está decidiendo es por los candidatos, por las campañas, por las plataformas de gobierno y no tanto por la ideología. La ideología tiende cada vez más a disminuir”.
—¿Y los partidos políticos están leyendo lo que los ciudadanos están diciendo?
“No. Yo creo que no de manera correcta porque si usted ve algunas de las declaraciones de las dirigencias son todavía expresiones que suponen que la victoria debería conllevar la desaparición del otro. Y la democracia no está hecha para eso.
“Entonces, para muchas personas que regrese el PRI a Los Pinos es inconcebible. Pero, bueno, tendrán que revisar… resulta que una porción importante de los mexicanos votó por esa opción. Entonces más vale que se pongan a pensar por qué. Algo hicieron mal o, en algún sentido, no quedaron bien con la población. Es lo que veo y creo que sería muy sano para el país…”.
—¿Cuál es el perfil de una alternancia que atienda las expectativas ciudadanas?
“Lo que es muy importante es seguir midiendo a través de estudios demoscópicos qué es lo quiere la ciudadanía, qué es lo que espera, en dónde se siente, digamos, satisfecha y en dónde no se siente satisfecha. Esa es una democracia moderna.
“El ciudadano que sólo gobierna por encuestas es un demagogo. Pero el ciudadano que no utiliza las encuestas para saber qué es lo que está sucediendo en una sociedad es un autoritario. Entonces, ahí vamos… lentamente construyendo democracia…”.
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