Para exigir un alto a los “operativos violentos y fuera de la ley”, Fray Tomás González Castillo realizó un ayuno de protesta frente a la sede del organismo federal en el municipio de Tenosique
Roberto Barboza Sosa / rbarbozasosa@hotmail.com
La otra cara de la moneda la expone Fray Tomás González Castillo, quien el jueves 4 decidió realizar un ayuno de protesta por 12 horas frente a la sede del INM en Tenosique, al considerar infructuosas las denuncias públicas y peticiones directas al Instituto, para el desistimiento de operativos “violentos” contra la comunidad inmigrante.
El también director de ‘La 72’, hogar-refugio para personas migrantes en el municipio fronterizo, sostiene que desde hace un mes el Instituto “comenzó operativos de detención de personas migrantes en Tabasco”.
Estos operativos —añade— violan la Ley de Migración y hacen caso omiso de tratados internacionales firmados por el Estado mexicano.
González Castillo, también sacerdote de la parroquia Cristo Resucitado de esta ciudad, se encadenó a los barrotes de la valla que circundan las oficinas de la delegación local del INM, donde fue acompañado por Rubén Figueroa, integrante del Movimiento Mesoamericano de Migrantes, quien también siguió el ejemplo del sacerdote franciscano.
El ayunante exigió el alto de los “operativos violentos y fuera de la ley” en contra de los indocumentados procedentes de países centroamericanos, que se internan por la frontera de Tabasco con Guatemala.
Por la línea fronteriza tabasqueña se registra un incesante flujo de inmigrantes de centroamericanos, quienes luego de internarse a México, transitan más de 60 kilómetros entre potreros, pantanos, arroyos y sierra, con el propósito de llegar a esta cabecera municipal para abordar el ferrocarril, continuar hacia el norte y llegar a la frontera con Estados Unidos.
Según el ayunante, la madrugada del miércoles 3, los agentes del INM realizaron un operativo para detener a los migrantes, cuando intentaban subirse al ferrocarril carguero que pasó alrededor de la 01:00 horas de ese día.
La persecución de los agentes llegó muy cerca de la Casa del Migrante ‘La 72’ (a 20 metros aproximadamente), de donde se llevaron a varias inmigrantes, entre ellas a una mujer, y otros más resultaron lesionados al caer cuando huían.
El refugio se ubica a unos 300 metros de las oficinas del INM y a 500 metros de las vías del tren.
CRECE VIOLENCIA EN LA FRONTERA
El defensor de los inmigrantes asegura que la “violencia aumenta” a pesar de que en dos ocasiones dialogaron con el delegado local del INM en Tenosique, quien sólo los engañó con la promesa de que revisaría esa situación, incluso de que acompañaría a sus agentes encargados de los operativos para que no incurrieran en esos excesos.
En la Casa del Migrante de Tenosique tenían hospedadas a cerca de 200 personas indocumentadas, quienes no lograron subirse al tren.
González Castillo dice que realiza esa medida en “solidaridad con el pueblo migrante perseguido”, y pidió a la comunidad defensora de los derechos de los migrantes a solidarizarse y presionar al gobierno mexicano, así como exigirle que cese y sancione las conductas fuera de la ley en que incurre el personal del INM.
El párroco de la iglesia Cristo Resucitado de Tenosique enumera que desde hace un mes el Instituto Nacional de Migración comenzó operativos de detención de personas migrantes en Tabasco.
“Lo que estamos viviendo en estos días en Tenosique es un exceso que posiblemente tenga consecuencias mortales. Estos operativos están fuera de la Ley de Migración, porque los lugares donde los realizan están prohibidos por la misma ley y se realizan con agresiones injustificables”, denuncia.
CIERAN CALDERÓN CON ‘BROCHE DE ORO’
“No es posible que en el marco de la transición gubernamental el INM, amparado por la Secretaría de Gobernación y por supuesto, por el Presidente Felipe Calderón, cierren con ‘broche de oro’ la presente administración que se ha caracterizado por acumular crímenes en contra de las personas migrantes”.
Entre los testimonios documentados en el archivo de ‘La 72’ —nombre asignado en honor al mismo número de migrantes asesinados en San Fernando, Tamaulipas—, está el de menor de edad, de 13 años, que llegó al refugio, acompañado de un grupo de migrantes.
Su tío había sido detenido en presencia del Ejército mexicano en La Palma, Tenosique. Una vez que el niño observó que su tío era detenido, corrió a los potreros. Ese mismo día fue traído a la Casa donde estuvo una semana.
Otro caso fue el de un hondureño que fue perseguido “brutalmente” por personal del INM en la comunidad de San Isidro Guasiván, al querer huir, cayó y se lastimó un brazo provocándole un esguince.
“Aun así los agentes lo levantaron de manera brutal y lo echaron al camión donde los detienen”, relata. Otra persona golpeada por los mismos agentes y lastimado de las costillas, ha puesto una demanda ante la PGR.
Dos personas de sexo masculino refirieron que al ser perseguidas en La Palma por agentes del INM se vieron obligados a arrojarse al río San Pedro. De esto fueron testigos gente de la comunidad, que incluso tuvo un enfrentamiento verbal con los agentes.
AGRESIONES SE REPITEN A DIARIO
“Todos los días nos ha llegado gente golpeada, arañada del cuerpo porque al correr se topan con los alambres de púas de los potreros o se encuentran con pantanos donde caen”, expone el religioso y activista social.
El propio Grupo Beta del INM, en el 2011, apoyó a 15 heridos y mutilados, así como 25 migrantes fueron rescatados por estar cansados y enfermos.
En este año fue rescatado un hondureño que llevaba tres días abandonado y sin comer entre los potreros y que por su condición física ya no podía seguir. Prácticamente se le salvó la vida.
Datos estadísticos del Instituto refieren que en Tabasco en 2011 fueron devueltos a sus países 316 menores inmigrantes.
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