De Alto Nivel

* La ruta de Tabasco y Peña  

* PRD de la mano con Núñez 

* ¿Quién guiará al tricolor? 

El nuevo eje. Por tercera ocasión consecutiva una administración estatal es oposición frente al gobierno federal. Manuel Andrade y Andrés Granier, transitaron con gobiernos federales panistas. Nada que resaltar a favor de la entidad.

Antonio Caraveo Maldonado / a_caraveo2001@hotmail.com

Ahora le toca encabezarlo a Arturo Núñez con las siglas del PRD frente al PRI de gobierno federal, pero con una historia que va a ser diferente.

Para ello hay coincidencias, partiendo de que el presidente electo Enrique Peña Nieto y el gobernador electo, son hombres de acuerdos y diálogo, que al final tendrá que ver con el desarrollo de Tabasco.

Las expresiones de Núñez Jiménez, luego de que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) validara la elección presidencial, en el sentido de que “yo tengo muy claras mis convicciones de carácter personal, pero también tengo muy claras las responsabilidades institucionales que habré de asumir a partir del 1 de enero”, son muy precisas.

Y fue más allá, al subrayar que por encima de las cuestiones personales “están mis responsabilidades institucionales como gobernador y las honraré con convicción de demócrata que soy y por respeto al mandato de ley”.

No son más que puentes hacia el gobierno federal en aras de que Peña Nieto cumpla su palabra de insertar a Tabasco al desarrollo nacional, tal como lo planteó durante su campaña.

Tal vez pueda haber suspicacia de que el mexiquense sea un presidente más y deje de lado a la entidad, pero no.

Núñez abona a que haya desarrollo. Y lo hace, pues tal vez sea su última encomienda como político en funciones.

No tiene el tiempo para tirarlo en discusiones estériles o pleitos que no llegan a ningún lado. Ya fueron suficientes 24 años de enfrentamientos.

Vienen tiempos de privilegiar las coincidencias. Y no es tarea de uno solo, cada quien tiene su propia responsabilidad.

LECCIONES

Calificada la elección presidencial, Las Tribus del PRD de Tabasco deben aprender que serán gobierno a partir del 1 de enero.

Han dado visos tímidamente. Y eso no será suficiente, pues Arturo Núñez ya mandó la señal de que el juego presidencial se acabó y no hay para donde hacerse.

Es importante que Las Tribus miren las funciones que ha emprendido el gobernador electo, desde antes y posteriormente que pasó la elección, 

La mesa está puesta. Falta que se diluya el tiempo hasta llegar enero y arropen en verdad a Núñez.

También que pongan atención a lo que dibujó el líder moral Cuauhtémoc Cárdenas, que de seguir el sectarismo en el interior PRD, este partido está destinado al fracaso.

Se puede entender que Las Tribus locales tienen de guía moral a Andrés López. El asunto es que pese a todo lo que se diga, no ganó la elección presidencial. Ya la autoridad electoral la validó.

No les queda más que distinguir hacia adelante porque si no van a ser rebasados. Y Núñez no está en la sintonía del enfrentamiento.

DE BAJADA

a) Oteando el horizonte hacia el 2015 no se ve claro quién va a guiar a los priistas. No hay un solo cuadro que aglutine a los grupos hacia esa trilla. Y eso de que el senador piltrafa se quiera adelantarse a ese cuadro, ya no tendrá los elementos para tal acción.

b) Le dieron palo al que titiritea a Isidro Mosqueda. Buscó lanzar una convocatoria para elegir al nuevo líder de la CNOP y no pasó la autorización de la dirección nacional que aún preside el ahora senador Emilio Gamboa Patrón.

c) Al líder del PRI estatal, Francisco Herrera León, no le sobresalta que vaya a salir en lo inmediato. En el CEN, una vez avalada la elección presidencial, van a esperar que tome el mando federal Enrique Peña Nieto, mientras se confirma la salida del actual presidente tricolor Pedro Joaquín Coldwell para ir a una Secretaría de Estado. Y de ahí la designación de quien será su relevo y a la vez ir siguiendo las relaciones que pueda tener con Tabasco, sin olvidar que tiene que pasar el dato por Peña.

d) No se sabe cómo se va a refundar el PAN en la entidad. Tuvieron todo para crecer, nada más que los intereses mezquinos de Juan José Rodríguez, desde que se hizo candidato a la gubernatura en 1994, empezó el declive. Fue la punta para hundirlo y dejar herederos que también le pegaron. De nada les sirvió ser gobierno federal durante 12 años y por ende tener las delegaciones federales. No les sirvió. Su activo más importante, Gerardo Priego, tendrá que meter mano si quiere hacer algo en el 2018. Ya sembró una semilla, falta que la cultiven sin andamiaje alguno.