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En la mira

Flota en el ambiente la duda de si con la alternancia en el Poder Ejecutivo de Tabasco permanecerán incólumes aquellos funcionarios que están al frente o desempeñan puestos claves en los llamados órganos autónomos, y cuyo desempeño ha sido cuestionado por actores de oposición o priistas disidentes. 

Fernando Hernández Gómez / fdohernandezg@hotmail.com

El PRD, que el 1 de enero se convertirá en el nuevo partido en el gobierno, trae en la mira a por lo menos dos de ellos, y a cinco meses que uno de los suyos —Arturo Núñez Jiménez— sea titular del Ejecutivo estatal y sus diputados se estrenen como nueva mayoría en el Congreso local, ya clama que rueden sus cabezas.

Se trata de dos personajes que se han convertido en el coco de los perredistas; uno, Francisco Rullán Silva, desde la titularidad del Órgano Superior de Fiscalización del estado (OSF), y el otro, Armando Xavier Maldonado Acosta, desde la Secretaría Ejecutiva del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana de Tabasco (IEPCT).

¿Se va o se queda Francisco Rullán en el OSF? Hace unos días, cuando se le preguntó si sentía temor a las amenazas de la dirigencia perredista de destituirlo como fiscal superior del estado, Francisco Rullán fue parco: “No me preocupa; ahora tengo otros pendientes que sí me ocupan”.

A los reporteros que lo arrinconaron con sus preguntas, el polémico y poderoso fiscal les recordó: “Ustedes deben de saber muy bien que yo estoy electo por siete años. No estoy en ese tema. Créamelo, no quiero entrar en polémica yo con los nuevos, ni con los actuales diputados”.

Envalentonado, Roberto Romero del Valle, haciendo gala de que es dirigente del que a partir del 1 de enero será partido en el gobierno, lanzó una amenaza que no se había escuchado en 23 años de vida del PRD: “Rullán se va porque se va; es una exigencia del PRD. Se va un corrupto y un impune”.

Se le hizo ver que fue designado por siete años y no puede destituírsele tan fácilmente. Y reviró: “Por los medios que sea se tiene que ir; para eso existe también forma de fincar las responsabilidades, y si no es por las buenas, es por las malas. Pero de que se va este señor se va… se tendrá que hacer la reforma de ley, se tendrá que hacer lo que se tenga que hacer. Rullán se va. Que le quede claro a Rullán”.

Sin la altivez del dirigente estatal de su partido, el gobernador electo midió muy bien sus palabras para referirse al OSF y a su titular, Francisco Rullán, quien fue su colaborador cuando se desempeñó como jefe de la bancada priista en San Lázaro.

Núñez Jiménez habló de la necesidad de replantear la fiscalización de los recursos públicos en el estado, porque el sistema de control “no ha funcionado” en el combate a la corrupción y requiere de una renovación, de un replanteamiento para darle autenticidad y también para permitir mayor participación ciudadana en la vigilancia de la aplicación de los recursos públicos, “y en ese paquete ya veremos el tema de los responsables de esa función”.

¿Se va o se queda Armando Maldonado en la secretaría ejecutiva del IEPCT?

La permanencia del controvertido e influyente funcionario del órgano electoral es un tema en el que han machacado dirigentes partidistas, candidatos, actores políticos y hasta los mismos consejeros del IEPCT.

Tras las elecciones del 1 de julio, el consejero electoral Rosendo Gómez Piedra retomó el que parecía un caso perdido: sacar al secretario ejecutivo.

“Nunca fue un tema olvidado. Cobra más vigencia”, aseveró el consejero identificado con el partido del sol azteca, quien señaló que se someterá a revisión tanto el desempeño como el comportamiento de todos los funcionarios del IEPCT.

Recordó que aún está pendiente que la Contraloría del IEPCT —otra instancia interna que tampoco depende del Consejo Estatal— les entregue los resultados de una queja que se interpuso contra Maldonado Acosta por presuntas faltas administrativas y que, según Gómez Piedra, podría derivar en una suspensión o hasta la destitución del secretario ejecutivo.

La representación perredista en el IEPCT acusa a Maldonado Acosta de una actuación parcial y dolosa desde el inicio del actual proceso electoral, cuando quiso impedir el registro de la coalición Movimiento Progresista de Tabasco, y se le señala como responsable de los reveses jurídicos que ha sufrido dicho órgano electoral de parte del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).

Quitado de la pena, Armando Maldonado afirmó que esperará “con la frente en alto” a que concluya el proceso electoral estatal; esto ocurrirá una vez que el TEPJF emita el fallo a la impugnación de la elección de gobernador, y desestimó todos los cuestionamientos hechos a su trabajo, asegurando que está al frente de “un equipo de profesionales” que conforman la Secretaría Ejecutiva.

Por lo visto, al secretario ejecutivo no le preocupa que puedan destituirlo, a lo mejor lo considera un escenario improbable. Y cree que si sale del IEPCT será por la ‘puerta grande’.

El presidente provisional del IEPCT, Gustavo Rodríguez Castro, no considera una probable destitución del funcionario al que han querido cesar, infructuosamente, los consejeros electorales, sino de una especie de ‘renuncia voluntaria’ por lo que tendría que indemnizársele por los años que lleva trabajando en la institución.

“Tenemos que revisar en este caso. Hay peticiones de algunos empleados de liquidarse, de un retiro voluntario, por decirlo así, y también tendremos que plantearlo en un momento dado, porque son recursos que hay que tomar en cuenta, en el caso de liquidaciones, sobre todo”, dijo.

En el caso de Maldonado Acosta, precisó: “Tenemos que plantear la liquidación de él, al parecer tiene 11 años en la institución”.

El gobernador electo Arturo Núñez, quien en diversos momentos del proceso electoral se enfrentó verbalmente con el funcionario del IEPCT —al grado de que llegó a condicionar su participación en las elecciones si éste continuaba al frente del organismo—, también ha sido cauto con este tema.

No forma parte del coro de voces que exigen la renuncia de Maldonado; sin embargo, difirió de lo apuntado por Rodríguez Castro de darle una indemnización.

Al opinar de la posible salida del secretario ejecutivo del IEPCT, Núñez Jiménez señaló que sólo si lo destituyen se le debe liquidar, pero no si él decide renunciar.