Hacinados, en incómodas oficinas por las que se pagaron rentas de más de 100 mil pesos mensuales, los empleados del Instituto prepararon el proceso electoral más complejo en la historia de Tabasco
Roberto Barboza Sosa / rbarbozasosa@hotmail.com
Todas las áreas operativas del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana de Tabasco (IEPCT) laboraron durante este proceso electoral totalmente hacinados y en la incomodidad de oficinas inadecuadas por las que se desembolsaron rentas exorbitantes de más de 100 mil pesos mensuales, pese a que se había comprado un inmueble (en junio del 2011), en más de 32 millones de pesos.
El edificio ubicado en Periférico No. 1206, colonia Tamulté, de esta capital, no sólo quedó como un ‘elefante blanco’, sino que ahora el IEPCT lo pretenderá devolver a sus dueños, pues es imposible utilizarlo por algunas fallas estructurales y estar construido sobre el relleno de un dren natural que atraviesa esa zona.
Para devolver el inmueble y que a su vez el IEPCT reciba el dinero pagado, así como daños y perjuicios, más los intereses originados por los 32 millones de pesos, se deberá entablar un juicio de nulidad de escrituras, entre otras demandas de carácter civil.
El representante legal y secretario ejecutivo del IEPCT, Armando Maldonado Acosta, señala que será después de que concluyan toda la tarea inherente al proceso electoral —en aproximadamente dos meses—, cuando se aboquen a tocar el tema del edificio adquirido.
Explica que todavía deberá sesionar la Junta Estatal Ejecutiva del Instituto para discutir ese asunto, determinar y aprobar los pasos a seguir al respecto, que podría ser una demanda civil con un juicio de nulidad, a fin de resarcir el patrimonio del IEPCT.
Todo será después de concluir con todo lo que respecta al trabajo de las juntas distritales y municipales, así como con toda la documentación legal del proceso de gobernador, regidores y diputados.
“Se tiene —afirma Maldonado Acosta— tiempo suficiente para realizar las acciones necesarias”. El secretario ejecutivo, como representante legal del IEPCT, es quien deberá presentar la demanda civil.
Abogados consultados sobre este tipo de juicios señalan que podría llevarse varios años para que el vendedor le devuelva al IEPCT el importe sufragado y los intereses, amén que el órgano electoral deberá aportar todos los elementos de prueba de los vicios ocultos del inmueble, así como daños y perjuicios sustentados en peritajes.
PERITOS AVALARON LA COMPRA
En junio del 2011, el ex consejero presidente del IEPCT, Alfonso Castillo Suárez, decidió adquirir el inmueble ubicado en Periférico, con el propósito de que el organismo tuviera su propio edificio, donde laboraran en condiciones óptimas y dejar de erogar las altas rentas de los inmuebles que utilizan en la calle Eusebio Castillo.
Esa casa y los terrenos donde el IEPCT ha ido construyendo de manera provisional sus oficinas para albergar todas sus áreas operativas y hasta la sala de sesiones, se la rentan al ex coordinador estatal de la campaña del candidato presidencial priista Enrique Peña Nieto, Same Yabur Elías.
“Inexplicablemente”, fue hasta después de la compra-venta del inmueble a costos súper-elevados, que en el IEPCT se dieron cuenta que era demasiado pequeño para albergar a todas las áreas de ese organismo, y se pretendió invertir otros ocho millones de pesos para construir otro edificio alterno, donde estaría la sala de sesiones, oficinas de consejeros y estacionamiento.
En aquel entonces, Castillo Suárez argumentaba —en rueda de prensa ex profesa— que la compra había sido transparente; incluso, afirmó que se tomó la decisión después de evaluar otros dos inmuebles que se habían tomado en consideración: uno ubicado atrás de la Secretaría de Finanzas, y otro sobre la avenida César Sandino, pero que había sido el de Periférico, que “recomendaron los peritos valuadores”.
Ese cuestionado inmueble estaba a nombre de los hermanos Gutti y Gilberto Galassi Cevallos.
POR EL IVA PAGARON APARTE 1.5 MDP
En su oportunidad, el ex consejero presidente del IEPCT se defendió de la decisión de adquirir el edificio que hoy se pretende devolver, al aducir que todos los consejeros habían estado de acuerdo, según minuta de trabajo de los consejeros electorales del día 4 de abril del 2010.
“En la sala de juntas del IEPCT se reunieron los consejeros electorales Alfonso Castillo Suárez, Antonio Ponce López, Elidé Moreno Cáliz, Rosendo Gómez Piedra, Héctor Aguilar Alvarado y Jorge Montaño Ventura, a efecto de analizar la viabilidad para la adquisición de un inmueble propio que alberque las instalaciones permanentes del IEPCT...”.
“Acto seguido... los integrantes de la comisión especial para la adquisición del inmueble, Héctor Aguilar Alvarado, Gustavo Rodríguez Castro y Jorge Montaño Ventura... ponen a consideración de los consejeros la adquisición del inmueble ubicado en la avenida Periférico número 1206, colonia Tamulté de las Barrancas, constante de una superficie construida de 1 mil 400 metros cuadrados en tres niveles y 1 mil 600 metros de estacionamiento…”.
El 11 de abril del 2011, se emitieron pólizas de cheques, para la compra-venta del edificio, donde participaron el entonces director de administración del IEPCT, Carlos Enrique Íñiguez Rosique, y el empresario, Gilberto Galassi Almora.
En copia de la póliza de cheque del IEPCT, el monto pagado al empresario fue de 31 millones 091 mil 520 pesos por concepto de “adquisición del inmueble autorizado mediante el acuerdo del Consejo Estatal No. CE/2010/004 aprobado en sesión extraordinaria del día 16 de julio de 2010, y acta de Junta Estatal Ejecutiva, de fecha 05 de abril de 2011”.
En segundo cheque, con número 0021582, se pagó un 16 por ciento del IVA correspondiente al valor de la construcción del nuevo edificio, y que fue de un millón 508 mil 480 pesos. Aunque el porcentaje por los 31 millones de pesos pagados, serían de cuatro millones 974 mil 643 pesos.
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