Las elecciones serán la mejor encuesta, aseveró tras recibir el impulso de López Obrador y el respaldo de miles de perredistas en la Plaza de la Revolución
Redacción / clip.redaccion@gmail.com
A menos de una semana de celebrarse las elecciones y luego de recibir el sábado el impulso de Andrés Manuel López Obrador y de miles de perredistas congregados en la Plaza de la Revolución, el candidato de la coalición PRD-PT-MC, Arturo Núñez Jiménez, cerrará fuerte su campaña hacia la gubernatura de Tabasco este miércoles 27, luego de haber recorrido todo el estado durante alrededor de 45 días, seguro de que el cambio verdadero y la alternancia están muy cerca, pese al bombardeo mediático en su contra.
Luego de que el fin de semana algunas encuestas que se difundieron en diarios nacionales y locales lo pusieron en el segundo lugar de las preferencias y otras menos difundidas en el primer sitio, el abanderado izquierdista señaló que el problema con algunas de ellas es que no son utilizadas como elemento de medición, sino como instrumento de propaganda, “por lo que al ser publicadas evidentemente dan la ventaja a quien paga por ellas”.
Arturo Núñez sostuvo que en muchos casos las encuestas fueron utilizadas para manipular a los electores, pues es evidente que en algunos diarios el criterio mercantil prevalece sobre el criterio objetivo del periodismo. No obstante, consideró que el problema de las encuestadoras no es la falta de profesionalismo, sino la falta de rigor de supervisión con quien las realiza, pues para no encarecer su precio, en vez de traer gente capacitada, contratan a grupos locales “y esos sí están maiceados”.
Abundó que en Tabasco es difícil que las encuestas pagadas sean certeras porque, por miedo a las represalias, la gente oculta la intención real del voto, ya que muchos trabajan para el gobierno del estado y tienen miedo de que los corran, algunos más tienen concesiones de taxis y temen que se las retiren, y otros son proveedores del gobierno y pueden dejar de comprarles.
EN ‘ESTADO DE COMA’
Núñez Jiménez señaló que Tabasco requiere de un cambio verdadero, porque en estos momentos se encuentra en el subdesarrollo económico, político y social, con altos índices de pobreza, marginación, desempleo y delincuencia, con un sector educativo “en la lona” y uno de la construcción “en estado de coma”.
La gente necesita oportunidades, que con una lista de supermercado y ocurrencias sacadas ‘de la manga’ no se podrán concretar, porque las promesas “a diestra y siniestra, sin sentido ni sustentadas en un diagnóstico real, no son más que demagogia para enganchar a incautos”, remarcó el perredista tras criticar fuertemente la brutal corrupción con la que ha sido conducido nuestro estado, sobre todo en los más recientes sexenios.
Aseguró que su administración combatirá frontalmente la corrupción y la negligencia en el servicio público en Tabasco, emprendiendo acciones preventivas fundadas en la ética de la responsabilidad y honestidad, así como medidas correctivas en los órdenes administrativo y penal, que impidan la simulación y desechen el nepotismo, amiguismo y tráfico de influencias.
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