Crisis de campañas proselitistas
Bertruy: de estratega a candidato
A menos de un mes para que inicien oficialmente las campañas al gobierno del estado, alcaldías y diputaciones el próximo 14 de mayo, lo que se ha observado es un buen termómetro para medir lo que podría esperarse en la contienda electoral y para la propia elección constitucional.
Javier Marín Hernández / clip.marin@gmail.com
Es preciso iniciar por lo que subyace en la opinión pública, que es el rechazo a las campañas y el hartazgo de la ciudadanía ante ejercicios gubernamentales poco transparentes y la percepción generalizada de actos de corrupción.
El candidato del PRI al Gobierno de Tabasco, Jesús Alí de la Torre, lo ha vivido en carne propia, enfrentando el rechazo de amplios sectores de la población sobre todo de aquellos que no militan en su partido, ni tienen militancia y que además conforman la mayoría del padrón electoral.
Recientemente, en un recorrido conjunto por el municipio de Centla con el candidato del PRI a la presidencia municipal, José Ángel Vasconcelos, en plena Semana Santa, justo cuando Alí de la Torre se acercaba para saludar a las familias que se encontraban en la playa pública de Pico de Oro, varios le negaron el saludo y pidieron respeto para su tiempo de esparcimiento.
Sin embargo, la diferencia la hizo el candidato a la alcaldía, quien sí fue reconocido y saludado por las familias nativas del lugar que allí se encontraban.
El mismo patrón se ha registrado en otros foros. En términos generales, las simpatías hacia el PRI no son nada favorables y la causa principal de ese rechazo es el vínculo gubernamental.
En el caso del candidato de las izquierdas, Arturo Núñez Jiménez, ha optado por los encuentros cerrados y previamente acordados, sin improvisaciones, por lo que es difícil precisar el nivel de aceptación o de rechazo que tiene entre la población en general.
Aunque pronto se sabrá con el inicio de las campañas electorales.
El experimentado senador con licencia sabe que prevalece una alta intención de cambio entre la población tabasqueña y esa es su apuesta para entrar de lleno a la contienda electoral enarbolando tal bandera.
En cuanto al panista Gerardo Priego Tapia, su candidatura parece estar condenada a ocupar el tercer lugar que han logrado quienes le han antecedido abanderando a este instituto político.
El voto duro del PRD y PRI hará la diferencia. Pese a que Priego Tapia no es un mal candidato, el tiempo será su principal enemigo.
Hay una crisis real, por lo que los candidatos tendrán que hacer el mejor de sus esfuerzos para convencer a esa masa incrédula que cada vez se resiste más…
Humberto de los Santos Bertruy: candidato
Como se adelantó con oportunidad en este espacio, Humberto de los Santos Bertruy se convirtió en el virtual candidato oficial del PRD a la presidencia municipal de Centro, al resultar ganador en la encuesta realizada por la empresa Covarrubias para ese instituto político.
De manera contundente obtuvo el mayor porcentaje en las cinco preguntas que se incluyeron en la encuesta, convirtiéndose en el triunfador indiscutible de la medición, además de obtener el menor margen de rechazo entre los encuestados.
El segundo lugar correspondió a Juan José Peralta Fócil, quien fue el primero en reconocer el resultado y sumarse a la naciente candidatura, al igual que quien ocupó el tercer sitio, José Manuel Cruz Castellanos, y la propia Leticia Taracena.
La cómoda ventaja de Luis Felipe Graham Zapata como el puntero en la intención electoral rumbo a la presidencia municipal de Centro enfrentará modificaciones por la nominación del candidato de la segunda fuerza política más importante del municipio y que además ya superó ampliamente en julio de 2006 el voto duro del PRI.
Misma que hasta la fecha nadie ha podido rebasar esa histórica votación obtenida por el PRD en una elección constitucional.
Ahora bien, De los Santos Bertruy es reconocido como un singular estratega político y eficiente operador electoral, siempre detrás de las decisiones importantes, pero ahora las circunstancias son distintas, porque se trata de su propia candidatura.
El momento político y las estrategias definirán el rumbo de la próxima elección constitucional.
La sombra de una transición pactada: Gobierno-Centro-Congreso se asoma de nuevo y es aquí donde todo y nada puede ocurrir.
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