*Días difíciles
*Alí: Política ficción
*Al fin, negociaciones
Con el inicio del 2012 se presentarán muchas complejidades por los asuntos pendientes que están marcados en la agenda pública de Tabasco; es, por principio de cuentas, la conclusión de la administración federal y estatal, previamente la celebración de elecciones constitucionales y el relevo en el gobierno, al igual que en otras áreas gubernamentales, lo que no será un asunto de mero trámite.
Javier Marín Hernández / clip.marin@gmail.com
Javier Marín Hernández / clip.marin@gmail.com
Este mes concluye también el periodo rectoral de Candita Gil Jiménez al frente de la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco, lo que constituirá todo un reto para quien la supla al frente del alma máter, después de una exitosa gestión que se caracterizó por el crecimiento en la infraestructura de todas sus divisiones académicas.
Quien asuma la rectoría a finales de este mes tendrá que dar continuidad a la gestión académica, pero sobre todo al crecimiento de la matrícula y a la consolidación de la UJAT, mejorando todos sus procesos, de manera que pueda colocarse entre las 10 mejores universidades públicas del país.
Hay cuatro finalistas de formación y servicio netamente académico: María Isabel Zapata Vázquez, Clara Luz Lamoyi Bocanegra, José Manuel Piña Gutiérrez y Wilfrido Contreras Sánchez.
Desde afuera, por así decirlo, el actual presidente del Tribunal Superior de Justicia, Rodolfo Campos Montejo, quien pese a su aspiración fue electo de manera unánime por el pleno de magistrados para un periodo anual más, esto el pasado 1 de enero. Y Luis Manuel Hernández Govea. Nadie más.
Y es que en la lógica de la democracia y de la academia, a diferencia de la política, la aritmética sí cuenta.
Para quienes piensan que en la Universidad se corre el riesgo de interrumpir el proceso de mejora continua y calidad, aunque sí es una posibilidad, no obstante, de acuerdo a las reglas que actualmente operan en la gestión para la obtención de recursos y financiamiento público y privado, el incumplimiento de algunas de estas inciden de manera negativa en las asignaciones presupuestales, de modo que el compromiso está bastante claro para quien sea el próximo rector o rectora.
En lo político, las elecciones son, sin duda alguna, la gran asignatura de los tabasqueños porque se renueva, además del gobierno de Tabasco, también las alcaldías y, por supuesto, el Congreso local.
Algunos problemas que se han venido presentando en la entidad y que guardan relación con el ejercicio de gobierno en los tres niveles también serán determinantes a la hora de acudir a las urnas…
Alí: Política ficción
Jesús Alí fue un alcalde gris. Opacado por la sombra de la administración que le precedió, la de Evaristo Hernández Cruz. Aún así, está convencido de que él debe ser el candidato al gobierno de Tabasco en 2012, no por sus resultados —que ni siquiera ajustaron dos años para un periodo que es de tres— al frente del Ayuntamiento de Centro como para medir su eficiencia como administrador público, sino por la estrecha amistad que le une con el hijo del exgobernador de Tabasco Salvador Neme Castillo, Benito Neme Sastré, quien es compadre del virtual candidato presidencial del PRI, Enrique Peña Nieto.
La clase “política” de Tabasco, acostumbrada a la grilla del aldeano, en donde lo que se rumora lo toma como verdad, acepta sin mayor análisis lo que se ha dicho: que el alcalde con licencia definitiva de Centro, Jesús Alí de la Torre, es quien tiene la venia del candidato presidencial y de todas las fuerzas del CEN del PRI para ser elegido candidato al gobierno de Tabasco, y que no hay más.
Como si los exabruptos y desaciertos de Peña Nieto no fueran argumento suficiente para reflexionar en las dificultades inherentes y personales que el mexiquense tiene para sumar otra inconformidad y la de un estado harto politizado como Tabasco, en un momento definitorio, clave, en el que todas las sumas cuentan, hacen ocioso pensar que Peña Nieto esté pensando en “sí, que sea Chucho el candidato…”. Eso es, por decir lo menos, estúpido.
Cierto personaje de ascendencia en el ámbito nacional confía al reportero: “no hay nada de eso, todo lo que se diga de Peña Nieto son meras especulaciones, Enrique está más preocupado en su candidatura y en los problemas que ahora enfrenta; su objetivo es ese y no el de resolver la candidatura al gobierno de Tabasco, quien asegure lo contrario simplemente está equivocado”.
No hay más absurdo que eso. Su obstinación es producto de un error, por así decirlo, local.
Jesús Alí de la Torre lo reconoció en una entrevista con Clip / Reporte Semanal el 11 de noviembre del 2011.
“Tengo que reconocer que en Andrés Granier hay un gobernante distinto, comprometido; quizá, ahora mismo, si éste no hubiese sido gobernador probablemente no sería… (un aspirante), probablemente tampoco, por supuesto, sería alcalde…”.
Esa es su realidad. Ni para discutirlo.
A la par de todo esto se han iniciado formalmente las primeras negociaciones, en la que quienes tienen realmente peso electoral van a entrar tanto por la vía local, como la nacional. Hasta los “marginados” serán tomados en cuenta y mucho, al igual que los irreductibles de adentro. The boss is the boss…! Ya lo veremos…
Quien asuma la rectoría a finales de este mes tendrá que dar continuidad a la gestión académica, pero sobre todo al crecimiento de la matrícula y a la consolidación de la UJAT, mejorando todos sus procesos, de manera que pueda colocarse entre las 10 mejores universidades públicas del país.
Hay cuatro finalistas de formación y servicio netamente académico: María Isabel Zapata Vázquez, Clara Luz Lamoyi Bocanegra, José Manuel Piña Gutiérrez y Wilfrido Contreras Sánchez.
Desde afuera, por así decirlo, el actual presidente del Tribunal Superior de Justicia, Rodolfo Campos Montejo, quien pese a su aspiración fue electo de manera unánime por el pleno de magistrados para un periodo anual más, esto el pasado 1 de enero. Y Luis Manuel Hernández Govea. Nadie más.
Y es que en la lógica de la democracia y de la academia, a diferencia de la política, la aritmética sí cuenta.
Para quienes piensan que en la Universidad se corre el riesgo de interrumpir el proceso de mejora continua y calidad, aunque sí es una posibilidad, no obstante, de acuerdo a las reglas que actualmente operan en la gestión para la obtención de recursos y financiamiento público y privado, el incumplimiento de algunas de estas inciden de manera negativa en las asignaciones presupuestales, de modo que el compromiso está bastante claro para quien sea el próximo rector o rectora.
En lo político, las elecciones son, sin duda alguna, la gran asignatura de los tabasqueños porque se renueva, además del gobierno de Tabasco, también las alcaldías y, por supuesto, el Congreso local.
Algunos problemas que se han venido presentando en la entidad y que guardan relación con el ejercicio de gobierno en los tres niveles también serán determinantes a la hora de acudir a las urnas…
Alí: Política ficción
Jesús Alí fue un alcalde gris. Opacado por la sombra de la administración que le precedió, la de Evaristo Hernández Cruz. Aún así, está convencido de que él debe ser el candidato al gobierno de Tabasco en 2012, no por sus resultados —que ni siquiera ajustaron dos años para un periodo que es de tres— al frente del Ayuntamiento de Centro como para medir su eficiencia como administrador público, sino por la estrecha amistad que le une con el hijo del exgobernador de Tabasco Salvador Neme Castillo, Benito Neme Sastré, quien es compadre del virtual candidato presidencial del PRI, Enrique Peña Nieto.
La clase “política” de Tabasco, acostumbrada a la grilla del aldeano, en donde lo que se rumora lo toma como verdad, acepta sin mayor análisis lo que se ha dicho: que el alcalde con licencia definitiva de Centro, Jesús Alí de la Torre, es quien tiene la venia del candidato presidencial y de todas las fuerzas del CEN del PRI para ser elegido candidato al gobierno de Tabasco, y que no hay más.
Como si los exabruptos y desaciertos de Peña Nieto no fueran argumento suficiente para reflexionar en las dificultades inherentes y personales que el mexiquense tiene para sumar otra inconformidad y la de un estado harto politizado como Tabasco, en un momento definitorio, clave, en el que todas las sumas cuentan, hacen ocioso pensar que Peña Nieto esté pensando en “sí, que sea Chucho el candidato…”. Eso es, por decir lo menos, estúpido.
Cierto personaje de ascendencia en el ámbito nacional confía al reportero: “no hay nada de eso, todo lo que se diga de Peña Nieto son meras especulaciones, Enrique está más preocupado en su candidatura y en los problemas que ahora enfrenta; su objetivo es ese y no el de resolver la candidatura al gobierno de Tabasco, quien asegure lo contrario simplemente está equivocado”.
No hay más absurdo que eso. Su obstinación es producto de un error, por así decirlo, local.
Jesús Alí de la Torre lo reconoció en una entrevista con Clip / Reporte Semanal el 11 de noviembre del 2011.
“Tengo que reconocer que en Andrés Granier hay un gobernante distinto, comprometido; quizá, ahora mismo, si éste no hubiese sido gobernador probablemente no sería… (un aspirante), probablemente tampoco, por supuesto, sería alcalde…”.
Esa es su realidad. Ni para discutirlo.
A la par de todo esto se han iniciado formalmente las primeras negociaciones, en la que quienes tienen realmente peso electoral van a entrar tanto por la vía local, como la nacional. Hasta los “marginados” serán tomados en cuenta y mucho, al igual que los irreductibles de adentro. The boss is the boss…! Ya lo veremos…
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