No pidamos a la dirigencia que cohesione si nosotros mismos estamos minando la fortaleza con acciones que lesionan la imagen y la unidad del priismo, advierteCon la cuenta regresiva a punto de cerrarse y las presiones incesantes de aspirantes y actores políticos, Miguel Alberto Romero Pérez defiende su posición como presidente del PRI Tabasco. “Hay capacidad y autoridad” para poder conducir al partido y su proceso interno, afirma.
Y a quienes acusan o perciben que todo está preparado para imponer a uno de los diez aspirantes en la candidatura al gobierno estatal, les asegura que “este proyecto que es el PRI no va dirigido a impulsar a un personaje o a algún grupo en especial; nuestro trabajo lo que garantiza es que los priistas lleguemos al día de la jornada electoral con un partido consolidado y exitoso”.
Pero también arremete contra los aspirantes que denotan desesperación, que le reclaman a cada a rato la ausencia de ‘piso parejo’ en la competencia interna.
“No se vale en estos momentos pretender querer obtener con chantajes lo que no se va a ganar con trabajo. No se puede decir que hay identidad priista, cuando a cada rato se amenaza a la unidad del partido y se vaticina una supuesta derrota porque no se cumplen condiciones personales”, sentencia.
En sus diálogos con militantes del interior del estado —Balancán, Jalapa y Paraíso, donde dio posesión a los comités municipales—, Romero Pérez ha sido más enérgico que en las entrevistas banqueteras que concede en Villahermosa, para defender la forma en que conduce al tricolor.
“No les pidamos a los dirigentes que cohesionen al partido, si nosotros mismos estamos minando la fortaleza con acciones que lesionan la imagen y la unidad del priismo en general. La dirigencia tiene la responsabilidad de la organización, la unidad del partido es responsabilidad de todos”, estableció.
Y dio garantías de que las decisiones “las vamos a tomar entre todos; no serán decisiones cupulares ni de grupo”.
SE SUPERARÁ EL MOREIRAZO
Un día después de la anunciada caída de su líder nacional, Humberto Moreira Valdés, el dirigente priista en la entidad habló de la fortaleza de su partido.
“Pertenecemos a un instituto político capaz de reponerse de cualquier adversidad, ya que el PRI es más que los nombres de quienes ocupamos espacios de dirección; el PRI es su militancia, que se encarga de mantenerlo vivo y vigente”, sostuvo.
El sábado —cuando se reunió con profesionista egresados del IPN—, Romero Pérez afirmó tras la salida de Humberto Moreira del CEN que éste dejó un partido ganador, capaz de enfrentar con éxito comicios competitivos.
“De cinco procesos bajo la conducción de Humberto Moreira, ganamos cinco”, enfatizó.
Luego expresó que desde la dirigencia estatal “haremos lo que le corresponde para que, llegado el momento, los órganos del partido responsables de emitir convocatorias y determinar tiempos y métodos puedan tener los elementos necesarios para que su cumpla con la voluntad de la mayoría de la militancia y sobre todo con la voluntad de lo que los tabasqueños están pidiendo”.
E insistió—en alusión tácita a los aspirantes— que nada de lo que se haga generará triunfos si no enfocan sus esfuerzos a consolidar la unidad del partido, ya que “lo primero es la gente, la sociedad y no los intereses personales”.
NO CAER EN PRECIPITACIONES
“Las cosas en el partido se van a hacer conforme lo marcan los tiempos electorales y conforme lo indican nuestros estatutos, y a pesar de que ya hay quienes quisieran que las cosas se apresuraran, no podemos caer en precipitaciones que puedan afectar lo fundamental que es la unidad del partido”, señaló Romero el viernes 30 de noviembre en Jalapa.
Allí sentenció que “quien sienta que sus aspiraciones e intereses están por encima de los del propio partido, se equivoca rotundamente. Quien amenace la unidad del PRI por pretender imponer su proyecto personal, pone en riesgo su propio proyecto y deja dudas sobre su verdadera identidad priista”.
Y remarcó: “No hay ni debe haber nada que logre dividir al priismo, ya que aquí lo más importante es el PRI y siempre el PRI”.
La militancia, dijo, está exigiendo y la sociedad está observando que se tomen las mejores decisiones con responsabilidad, con unidad, con inteligencia para el desarrollo de México y de Tabasco.
“Hoy son momentos de definiciones a favor de la unidad del partido y quienes vayan a enarbolar la bandera de nuestro partido serán los candidatos de todos nosotros y, por lo mismo, van a recibir de manera indudable el apoyo de todos. Aboquémonos a prepararnos para ganar, para convencer, sobre todo para transmitir que somos un partido no tan sólo ganador, sino dispuesto a mejorar las condiciones del país y de Tabasco”, aseveró.
Y a quienes acusan o perciben que todo está preparado para imponer a uno de los diez aspirantes en la candidatura al gobierno estatal, les asegura que “este proyecto que es el PRI no va dirigido a impulsar a un personaje o a algún grupo en especial; nuestro trabajo lo que garantiza es que los priistas lleguemos al día de la jornada electoral con un partido consolidado y exitoso”.
Pero también arremete contra los aspirantes que denotan desesperación, que le reclaman a cada a rato la ausencia de ‘piso parejo’ en la competencia interna.
“No se vale en estos momentos pretender querer obtener con chantajes lo que no se va a ganar con trabajo. No se puede decir que hay identidad priista, cuando a cada rato se amenaza a la unidad del partido y se vaticina una supuesta derrota porque no se cumplen condiciones personales”, sentencia.
En sus diálogos con militantes del interior del estado —Balancán, Jalapa y Paraíso, donde dio posesión a los comités municipales—, Romero Pérez ha sido más enérgico que en las entrevistas banqueteras que concede en Villahermosa, para defender la forma en que conduce al tricolor.
“No les pidamos a los dirigentes que cohesionen al partido, si nosotros mismos estamos minando la fortaleza con acciones que lesionan la imagen y la unidad del priismo en general. La dirigencia tiene la responsabilidad de la organización, la unidad del partido es responsabilidad de todos”, estableció.
Y dio garantías de que las decisiones “las vamos a tomar entre todos; no serán decisiones cupulares ni de grupo”.
SE SUPERARÁ EL MOREIRAZO
Un día después de la anunciada caída de su líder nacional, Humberto Moreira Valdés, el dirigente priista en la entidad habló de la fortaleza de su partido.
“Pertenecemos a un instituto político capaz de reponerse de cualquier adversidad, ya que el PRI es más que los nombres de quienes ocupamos espacios de dirección; el PRI es su militancia, que se encarga de mantenerlo vivo y vigente”, sostuvo.
El sábado —cuando se reunió con profesionista egresados del IPN—, Romero Pérez afirmó tras la salida de Humberto Moreira del CEN que éste dejó un partido ganador, capaz de enfrentar con éxito comicios competitivos.
“De cinco procesos bajo la conducción de Humberto Moreira, ganamos cinco”, enfatizó.
Luego expresó que desde la dirigencia estatal “haremos lo que le corresponde para que, llegado el momento, los órganos del partido responsables de emitir convocatorias y determinar tiempos y métodos puedan tener los elementos necesarios para que su cumpla con la voluntad de la mayoría de la militancia y sobre todo con la voluntad de lo que los tabasqueños están pidiendo”.
E insistió—en alusión tácita a los aspirantes— que nada de lo que se haga generará triunfos si no enfocan sus esfuerzos a consolidar la unidad del partido, ya que “lo primero es la gente, la sociedad y no los intereses personales”.
NO CAER EN PRECIPITACIONES
“Las cosas en el partido se van a hacer conforme lo marcan los tiempos electorales y conforme lo indican nuestros estatutos, y a pesar de que ya hay quienes quisieran que las cosas se apresuraran, no podemos caer en precipitaciones que puedan afectar lo fundamental que es la unidad del partido”, señaló Romero el viernes 30 de noviembre en Jalapa.
Allí sentenció que “quien sienta que sus aspiraciones e intereses están por encima de los del propio partido, se equivoca rotundamente. Quien amenace la unidad del PRI por pretender imponer su proyecto personal, pone en riesgo su propio proyecto y deja dudas sobre su verdadera identidad priista”.
Y remarcó: “No hay ni debe haber nada que logre dividir al priismo, ya que aquí lo más importante es el PRI y siempre el PRI”.
La militancia, dijo, está exigiendo y la sociedad está observando que se tomen las mejores decisiones con responsabilidad, con unidad, con inteligencia para el desarrollo de México y de Tabasco.
“Hoy son momentos de definiciones a favor de la unidad del partido y quienes vayan a enarbolar la bandera de nuestro partido serán los candidatos de todos nosotros y, por lo mismo, van a recibir de manera indudable el apoyo de todos. Aboquémonos a prepararnos para ganar, para convencer, sobre todo para transmitir que somos un partido no tan sólo ganador, sino dispuesto a mejorar las condiciones del país y de Tabasco”, aseveró.
NO HABRÁ ESPACIO PARA QUIEN AMENACE
Esta línea discursiva la ha mantenido desde principios del mes pasado. El 10 de noviembre, en Paraíso, indicó que el tipo de priistas que le interesa al tricolor son aquellos que realmente quieren a su partido; “no aquéllos que solamente representan sus intereses personales y quienes con sus malas actitudes lo único que hacen es fomentar el rechazo de quienes nos están viendo desde afuera”.
Sostuvo que en la dirigencia estatal y en la representación nacional en el estado, “hay capacidad, hay disciplina y sobre todo hay autoridad para poder conducir al partido”.
Antes, en Balancán, aseveró que la dirigencia que encabeza está dispuesta a sentarse a dialogar con todas las fuerzas, con todas las corrientes y todas las formas de pensar al interior del partido.
“Estamos en la mejor disposición de escuchar y atender todos los planteamientos e inquietudes que los cuadros del partido quieran plantear, pero no a consentir acciones que dañen a nuestro instituto político; no vamos a ceder a posiciones menoscabando la unidad”, asentó.
Y advirtió: “No hay espacio en el PRI que tenga que otorgarse a quien con chantajes, con amenazas y sobre todo con afectación a la militancia quiera ganar un espacio. Un candidato para el cargo que sea, que quiera estar fuerte, necesita un partido fuerte”, recalcó.
Esta línea discursiva la ha mantenido desde principios del mes pasado. El 10 de noviembre, en Paraíso, indicó que el tipo de priistas que le interesa al tricolor son aquellos que realmente quieren a su partido; “no aquéllos que solamente representan sus intereses personales y quienes con sus malas actitudes lo único que hacen es fomentar el rechazo de quienes nos están viendo desde afuera”.
Sostuvo que en la dirigencia estatal y en la representación nacional en el estado, “hay capacidad, hay disciplina y sobre todo hay autoridad para poder conducir al partido”.
Antes, en Balancán, aseveró que la dirigencia que encabeza está dispuesta a sentarse a dialogar con todas las fuerzas, con todas las corrientes y todas las formas de pensar al interior del partido.
“Estamos en la mejor disposición de escuchar y atender todos los planteamientos e inquietudes que los cuadros del partido quieran plantear, pero no a consentir acciones que dañen a nuestro instituto político; no vamos a ceder a posiciones menoscabando la unidad”, asentó.
Y advirtió: “No hay espacio en el PRI que tenga que otorgarse a quien con chantajes, con amenazas y sobre todo con afectación a la militancia quiera ganar un espacio. Un candidato para el cargo que sea, que quiera estar fuerte, necesita un partido fuerte”, recalcó.
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