Tabasco está listo para la alternancia

En un estado como Tabasco que institucionalmente vive con una Constitución que data de 1824 y una división política añeja, con graves problemas en la calidad de la educación de su población, con comunidades en sus municipios con grados de pobreza extrema, sus habitantes se sienten lejos de sus gobernantes, con carencias en los más elementales servicios como son el agua potable, electrificación, vivienda y empleo.

Tabasco ha sido gobernado durante más de 80 años por administraciones emanadas del PRI, que ha sobrevivido gracias a la generosidad de muchas y muchos tabasqueños, y también, hay que decirlo, al abuso de funcionarios corruptos que de la noche a la mañana pasan a ser los nuevos millonarios en sus municipios.
Ciudadanos que son abrazados en épocas de elecciones pero que son abandonados en momentos críticos como las inundaciones por las que han pasado en sus comunidades, con un gobierno estatal cuya máxima política pública es regalar bicicletas, dar bonos de fatiga y desemplear a miles de trabajadores con el pretexto de una “reingeniería”…
Con todo esto hoy Tabasco vive el ánimo ferviente de la ciudadanía de generar la alternancia, oportunidad histórica para Acción Nacional y los partidos de oposición de darle un nuevo rumbo a la vida de nuestro estado.
De igual manera, el PAN ha tenido la gran oportunidad de demostrar que sabe gobernar en los ayuntamientos de Balancán y Emiliano Zapata, municipios en donde las políticas públicas van encaminadas a invertir en la ciudadanía y no en el gobierno, porque a diferencia de dar un “bono de fatiga” a los servidores públicos, las administraciones municipales han dado la posibilidad de acceder a servicios de agua potable, pozos profundos y empleo, ya que la referencia histórica de Balancán eran las sequías y en Emiliano Zapata la generación de fuentes de trabajo.
Hoy, sin duda, en Tabasco la inversión del gobierno federal se percibe claramente con respecto a programas importantes de delegaciones como Sedesol, Semarnat, Fonaes, SCT, Reforma Agraria y Sagarpa, principalmente, sin dejar a un lado las otras 44 delegaciones federales que día a día derraman recursos que benefician a la ciudadanía tabasqueña; es decir, la política pública del presidente Calderón está presente en nuestra entidad, aunque el gobierno del estado no lo reconozca.
La ciudadanía de Tabasco tendrá la oportunidad de decidir entre el atraso, la corrupción y la indiferencia convertida en abandono y, por el otro lado, la alternativa de iniciar el periodo de resurgimiento de un nuevo estado vigoroso, capaz de generar seguridad a sus habitantes, de dar condiciones para generar empleos, de dar acceso a vivienda digna en las comunidades marginadas, en fin.
Por todo esto, hoy nuestro querido Tabasco está listo para la alternancia en 2012. La decisión la tiene la ciudadanía.