Esta porción de Centro fue declarada de ‘alto riesgo’ de inundación… ¡y viene lo peor!
Sobre la zona de los Az-tlanes en el municipio de Centro, el Movimiento Ecologista de Tabasco (Metab), que ha dado seguimiento al problema que viven miles de familias de esa zona, estima en poco más de 180 millones de pesos las pérdidas sufridas en las comunidades de Aztlán por la inundación que provocó la construcción del cauce de alivio al Grijalva.
Javier Torres Sánchez, líder del Metab, señala que su organización registró que en la zona de Aztlán se encuentran afectadas cinco mil hectáreas que los campesinos venían trabajando desde hace varias generaciones en los ramos agrícolas y ganaderos, pero que con la construcción de obras del Plan Hídrico esos terrenos han quedado inservibles porque permanecen anegados casi todo el año.
Sostuvo que lo peor de todo es que los responsables, como la Conagua y el gobierno federal no han pagado los daños por afectaciones a los cultivos, como tampoco el daño permanente que sufre la tierra.
El problema en las cinco secciones de Aztlán, en donde viven más de tres mil habitantes, es crítico porque han dejado de producir alimentos para su autoconsumo, como frijol, maíz, arroz, plátano, cítricos y hortalizas, entre otros.
Ahora tienen que desplazarse de sus comunidades —de las que sólo se sale por vía fluvial en estos tiempos— a los mercados de Villahermosa, a comprar granos, frutas y verduras, porque se vive crisis alimentaria en la zona, afirma.
Torres Sánchez sostuvo que en Aztlán se vive desesperanza entre las familias que se encuentran abandonadas a su suerte.
EL ECOCIDIO… ¡NO EXISTIÓ!
Refiere que el Metab presentó hace tres años denuncia por ecocidio ante la Procuraduría General de la República, pero el Ministerio Público resolvió que no había los elementos para constituir el delito, por lo que se presentó un amparo sobre el resolutivo.
Resalta que la tierra de Aztlán en sus cinco secciones ya fue declarada como ‘de alto riesgo de inundaciones’, y será así, añade, “porque se construyen otras ventabas que llevarán el agua al sistema lagunar Los Zapotes que inundarán más a esa región.
Torres Sánchez advierte que lo peor está por venir y ocurrirá cuando se concluya el puente y vertedero que se construye sobre la carretera Villahermosa-Macuspana, y la ‘ventana’ de alivio El Censo-Sabanilla que llevará más agua del Grijalva a esa zona (hasta mil litros por segundo en momentos de extrema gravedad), que ha sido declarada, de acuerdo al Atlas de Riesgo, como zona altamente de riesgo de inundación.
En 2008, cuando habitantes de El Tintillo y Aztlán se oponían a la construcción de esa ‘ventana’, fueron golpeados por la fuerza pública; en esa ocasión los campesinos y ganaderos se defendieron tirando sobre el camino su ganado, pero al fin se impuso la fuerza y se realizó la obra que ya les está enviando agua en demasía a sus propiedades.
Javier Torres Sánchez, líder del Metab, señala que su organización registró que en la zona de Aztlán se encuentran afectadas cinco mil hectáreas que los campesinos venían trabajando desde hace varias generaciones en los ramos agrícolas y ganaderos, pero que con la construcción de obras del Plan Hídrico esos terrenos han quedado inservibles porque permanecen anegados casi todo el año.
Sostuvo que lo peor de todo es que los responsables, como la Conagua y el gobierno federal no han pagado los daños por afectaciones a los cultivos, como tampoco el daño permanente que sufre la tierra.
El problema en las cinco secciones de Aztlán, en donde viven más de tres mil habitantes, es crítico porque han dejado de producir alimentos para su autoconsumo, como frijol, maíz, arroz, plátano, cítricos y hortalizas, entre otros.
Ahora tienen que desplazarse de sus comunidades —de las que sólo se sale por vía fluvial en estos tiempos— a los mercados de Villahermosa, a comprar granos, frutas y verduras, porque se vive crisis alimentaria en la zona, afirma.
Torres Sánchez sostuvo que en Aztlán se vive desesperanza entre las familias que se encuentran abandonadas a su suerte.
EL ECOCIDIO… ¡NO EXISTIÓ!
Refiere que el Metab presentó hace tres años denuncia por ecocidio ante la Procuraduría General de la República, pero el Ministerio Público resolvió que no había los elementos para constituir el delito, por lo que se presentó un amparo sobre el resolutivo.
Resalta que la tierra de Aztlán en sus cinco secciones ya fue declarada como ‘de alto riesgo de inundaciones’, y será así, añade, “porque se construyen otras ventabas que llevarán el agua al sistema lagunar Los Zapotes que inundarán más a esa región.
Torres Sánchez advierte que lo peor está por venir y ocurrirá cuando se concluya el puente y vertedero que se construye sobre la carretera Villahermosa-Macuspana, y la ‘ventana’ de alivio El Censo-Sabanilla que llevará más agua del Grijalva a esa zona (hasta mil litros por segundo en momentos de extrema gravedad), que ha sido declarada, de acuerdo al Atlas de Riesgo, como zona altamente de riesgo de inundación.
En 2008, cuando habitantes de El Tintillo y Aztlán se oponían a la construcción de esa ‘ventana’, fueron golpeados por la fuerza pública; en esa ocasión los campesinos y ganaderos se defendieron tirando sobre el camino su ganado, pero al fin se impuso la fuerza y se realizó la obra que ya les está enviando agua en demasía a sus propiedades.
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