Reflexiones de un ciudadano

Elección de delegados, otro viacrucis en Tamulté

Quizás se requiere la consulta a un plano regulador de la ciudad de Villahermosa, que es la cabecera municipal del municipio de Centro, para que nos quede claro hasta dónde es el límite de nuestra ciudad, porque todos los villahermosinos pensamos, o quizás una parte de ellos, que la ciudad de Villahermosa abarca también a sus colonias, como Tamulté de las Barrancas, Primero de Mayo. Lo que conocimos como la Col. Águila, y otras que nacieron después, para poderle dar una interpretación más adecuada al artículo 64 de la Constitución Política del Estado Libre y Soberano de Tabasco, que dice: 

Tomás Aguilar Yedra / tomas_yedra@hotmail.com

“…Fracc. IX, en los diversos centros de población del municipio, excepto la cabecera municipal, se designarán o elegirán de acuerdo con la ley correspondiente, las autoridades municipales que representen al ayuntamiento”.

En Tamulté de las Barrancas la elección del delegado municipal o agente municipal, como le llamaban antes, siempre ha dejado secuelas, por los insultos personales, agresiones hasta físicas entre los interesados, incluso ofensas a los presidentes municipales por inconformidades durante el registro de candidatos y después de la elección por las personas interesadas en ocupar el puesto de delegado.

Y pienso que Tamulté de las Barracas no es la excepción, porque en otros lugares oigo que sucede lo mismo. Pero además los colonos culpan a los delegados de no atender sus demandas, cuando los delegados no cuentan con recursos ni humanos ni materiales para resolverlas. Un ejemplo es la basura y su recolección, las banquetas, el alumbrado público, alcantarillado cuando se tapa, y ahora mismo, ahorita, hay viejas demandas sin que el delegado municipal las pueda atender, aunque quisiera.

En el caso de la colonia mencionada, se trata del arroyo El Chinín, que es una vieja descarga de aguas negras que afecta horriblemente a los habitantes del rumbo, porque esas aguas negras desprende un tufo horrible, una pestilencia que sus habitantes tienen que soportar porque no tienen a donde ir por falta de recursos económicos, y debido a esa infección la gente de ahí vive enferma de todo, ya le sale caro al gobierno, porque no salen del Centro de Salud que les queda cerca. Yo invito a Don Humberto a que vayamos al lugar para que viva esos momentos de pestilencia. Y este problema lo conoce el ayuntamiento, pero no lo atiende.

Problemas como este y muchos más un delegado no los puede resolver, por lo que en Tamulté de las Barrancas ya es tiempo de que se acabe con ese cuento de la elección de delegado.

Aquí en Tamulté hay un ciudadano de nombre Vicente Aguilar Pérez, que es persona de prestigio y de respeto, y creo que Don Humberto de los Santos lo debe tomar en cuenta para que lo represente.