En el municipio de Huimanguillo temen el arribo de la peligrosa enfermedad HLB, que amenaza con entrar al estado desde Campeche y Chiapas
Alejandro Esquivel C. / alesquivelc@hotmail.com
Cerca de dos mil productores de limón persa y naranja, con un promedio superior a las 14 mil hectáreas en plantaciones en el municipio de Huimanguillo, temen el arribo de la peligrosa enfermedad HLB (Huanglongbing), que amenaza con entrar al estado desde Campeche y Chiapas.
El temor de productores y exportadores citrícolas, así como de autoridades del país, no es para menos, pues pende sobre las plantaciones la amenaza devastadora de la enfermedad, mejor conocida como el ‘Dragón amarillo’, luego de que desde julio de 2009 se detectara su presencia en territorio nacional.
Esta nueva bacteria se suma a otras enfermedades que atacan a los cítricos, por lo que para sostenerlos se incrementarán los costos de producción, antes de que desaparezca esta importante actividad agroeconómica en 22 estados del país.
Tanto en Campeche como en Benemérito de las Américas, Chiapas, ya se detectó la presencia de la plaga, que especialistas dan por hecho llegará a Tabasco y afectará las plantaciones.
Ante ello, representantes de diversas uniones de productores lanzaron un llamado de alerta, y ayuda, para que el ‘Dragón amarillo’ no devore sus plantaciones. En reuniones que han efectuado, han tomado acuerdos con respecto a las medidas emergentes que deben aplicar para evitarlo.
De entrada admiten que es un hecho que la plaga llegará a territorio tabasqueño, pues además, no hay medidas legales para obligar a un productor a que derribe sus plantas afectadas, y desafortunadamente no todos los productores cuentan con bombas aspersoras para la fumigación.
Aunado a ello, coinciden en que les hace falta asesoría técnica, existen plantaciones abandonadas de la empresa Cítricos de Tabasco, no hay un estricto control en las casetas de vigilancia con respecto a los productos que ingresan de otros estados, así como tampoco apoyo directo gubernamental, por lo cual “somos los propios productores quienes debemos organizarnos para hacerle frente a esta plaga”.
Así lo señala Uldárico Martínez, quien indica que aunque ya se han hecho casi dos mil muestreos en distintas plantaciones hasta ahora, “y nos encontramos libres de la enfermedad”, ahora es cuando mayor vigilancia se debe aplicar por parte de las autoridades fitosanitarias.
Dijo que aunque el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria ha declarado al estado bajo control fitosanitario, se teme el inminente arribo y propagación de la bacteria, al detectarse la presencia del insecto asiático diaphorina citri —responsable de propagarla de plantas enfermas de HLB a árboles sanos—, que una vez que infecta a la planta, la seca hasta matarla.
En nuestro país, según la Dirección General de Fomento a la Agricultura, en 22 entidades se destinan 526 mil hectáreas a la producción de naranja, limón, mandarina, tangerina, lima y toronja.
En dichas entidades se producen 6.7 millones de toneladas anuales de cítricos, con un valor de ocho mil millones de pesos, en beneficio de 67 mil productores y que generan 70 mil empleos directos y 250 mil indirectos.
DRAGÓN MORTÍFERO
Aunque no es peligrosa para los humanos, la enfermedad conocida también como el enverdecimiento de los cítricos destruye la producción, apariencia y valor económico de los árboles de cítricos, así como el sabor de la fruta y su jugo.
Es la enfermedad más destructiva de las plantas de cítricos mundialmente; una vez que un árbol está infectado, no tiene cura. Los árboles enfermos producen frutos amargos, incomibles y deformes que eventualmente mueren.
Cabe mencionar que esta enfermedad causó la muerte de más de 50 millones de plantas en Asia, tres millones en Indonesia y 10 millones en África, y es considerada como la más destructiva, debido a la severidad de los efectos, la rapidez con que se dispersa y porque afecta a todas las especies de cítricos.
Para el estado de Colima, donde el cultivo de cítricos es uno de los más importantes de su economía, sería catastrófico que llegue esa enfermedad, considera el presidente del Consejo Estatal del Limón, Sergio Díaz González. Por ello, exhortó a los productores atender los avisos del Comité de Sanidad Vegetal; “esa plaga nos preocupa, pues si se propaga podría afectar las plantaciones, la economía de los citricultores y del estado mismo”, advierte.
A pesar de su reducida superficie, Colima es el tercer estado con mayor producción de limón a nivel nacional, sólo superado por Veracruz y Michoacán.
Mientras, en Tabasco, se realizan tareas de combate y control del insecto transmisor de la bacteria; sin embargo, es inevitable que en cualquier momento esa enfermedad de los cítricos llegue a nuestra entidad, aunque la Secretaría de Desarrollo Agropecuario, Forestal y Pesca (Sedafop) ya ha prohibido la entrada de frutas cítricas a la entidad.
El titular de esa pendencia, Ignacio Lastra Marín, dice que se fortalecieron los controles y cordones fitozoosanitarios de manera preventiva para evitar que esa enfermedad infecte a las plantaciones tabasqueñas.
Expresa que esa enfermedad no es sólo un problema de los productores y de los gobiernos federal, estatal y municipal, sino de la sociedad, y expuso que las personas deben evitar el traslado de plantas o frutas cítricas desde los estados de Campeche, Chiapas, Veracruz y Oaxaca.
Finalmente, recuerda que el año pasado los citricultores tabasqueños produjeron 203 mil 537 toneladas, de las cuales 78 mil 310 corresponden a naranja, 81 mil 467 a limón, 869 a toronja, 360 toneladas a mandarina, y 42 mil 360 toneladas a piña.
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