Advierte Rogelio Urrusti en el marco del Primer Encuentro de Artistas Plásticos del Sureste
Samuel L. Soto Giles. / gi_les@hotmail.com
La gran exposición, pero desolada galería en que se convirtió el Centro de Convenciones, del Primer Encuentro de Artistas Plásticos del Sureste terminó el domingo pasado al que asistieron 51 pintores y escultores de Campeche, Chiapas, Oaxaca, Quintana Roo, Veracruz, Yucatán y Tabasco.
De esa gran muestra plástica destaca el grabado de Fernando Sevilla, el óleo de Roble Espinosa, la sanguina de Atilano Caña, el paisaje de Héctor Quintana, la escultura de Tomás Mejía y el acrílico de Rogelio Urrusti.
En este espacio se presentó el maestro Rogelio Urrusti con la conferencia “Acercamiento a una realidad estética de las artes plásticas en el Tabasco del siglo XXI”, en la que indicó que “nos encontramos en las galerías particulares y oficiales mediocridades de trabajos que son casi ejercicios escolares”.
Dijo que así como se aprende a leer y a escribir también se puede aprender a dibujar, pintar, esculpir o grabar, “en efecto, no se trata de que apareció la musa porque todo resultado se debe a la disciplina y desempeño en el aprendizaje y ejecución de las herramientas, materiales y técnicas adecuadas”.
Detalló que en Tabasco prevalece la enseñanza mediática en las escuelas secundarias oficiales y privadas debido a la improvisación de instructores de “artística”, que así le llaman a esta materia que deviene en trabajos manuales.
“Por lo regular se ocupan estos puestos gracias a compadrazgos, gratitudes políticas o a ciertas influencias del sindicato del magisterio”, señaló.
Describió que para la enseñanza de las artes plásticas en Tabasco también se encuentran con talleres comunitarios independientes, los talleres culturales universitarios, la escuela de iniciación artística Casa de Artes “José Gorostiza” y el Centro de Estudios e Investigación de las Bellas Artes, (CEIBA), donde se imparte la carrera de Licenciatura en Promotoría Cultural y Educación Artística, “pero no es escuela de artistas”.
“Y ya se tienen espectadores de exposiciones que han tenido acercamiento con talleres de pintura, libros, revistas o el medio cultural, la codificación visual, intelectual y hasta filosófico”, apuntó.
Sin embargo, dijo que “nos podemos encontrar con los celos de uno que otro profesional, la antropofagia, pseudo intelectuales y la mafia de grupos que giran en tornos a galerías, que son un reflejo brutal de la realidad de la plástica de Tabasco”.
Destacó que si se echa un vistazo a la producción artística de algunos años atrás y se compara con lo actual, “están produciendo los mismos pintores y algunos no se han podido olvidar de ciertas influencias y deformaciones profesionales heredadas”.
“La vanidad, la petulancia, el encono —de cómo los artistas se maltratan entre sí—, anulan toda posibilidad de afianzar una pintura que trascienda a otros países”, puntualizó Rogelio Urrusti.
En la inauguración del encuentro de pintores se le hizo un reconocimiento a la trayectoria profesional del pintor, escultor y fotógrafo tabasqueño Marco Lamoyi, quien presentó la conferencia: “El arte para qué…”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario