El organismo ambientalista insiste en que el gobierno federal debe resarcir los daños causados a las comunidades por obras del PHIT
“No claudicaremos en nuestro empeño de que sean resarcidos los daños socioeconómicos en la zona El Tintillo-Aztlanes causados por el canal de alivio El Tintillo”, advierte el coordinador estatal de la asociación civil Movimiento Ecológico de Tabasco (METAB), Javier Torres Sánchez.
El representante de esa organización no gubernamental informa que en este momento están en espera de que los tribunales, a través de sentencias, condenen a las dependencias responsables al pago de indemnizaciones económicas por los daños ocasionados a los particulares y ejidatarios por causa de las ventanas de alivio.
Señala que, aunque ya se firmó una minuta con la Comisión Nacional del Agua (Conagua), en caso de no cumplirse “llegaremos a instancias internacionales”.
“Tomando en cuenta que el Plan Hídrico Integral de Tabasco (PHIT) sigue avanzando, que esas comunidades continuarán con inundaciones, necesitamos prever que los habitantes no sigan sufriendo más perdidas por ese tipo de acciones, por el contrario exigimos la reactivación de su economía”, puntualiza Torres Sánchez.
El lunes 12 de marzo el presidente Felipe Calderón Hinojosa y el gobernador Andrés Granier Melo inauguraron otro cauce de alivio, el de Sabanilla, ubicado en la ranchería Torno Largo Tercera Sección.
Esta obra en la que se invirtieron más de 205 millones de pesos tiene el compromiso, asumido por la federación en 2008, de evitar que el río Grijalva se desborde sobre Villahermosa.
Por tres ocasiones, Calderón Hinojosa destacó que con esa otra obra se reducen los riesgos de inundación de centros habitacionales tan importantes como la capital tabasqueña.
“Sólo en los cauces de alivio y muros de protección, como parte del PHIT, se han invertido recursos sin precedentes por un monto de casi ocho mil millones de pesos”, informó.
Reiteró que la seguridad física y patrimonial de casi 600 mil tabasqueños ya está protegida contra las inundaciones y que a partir de 2012 se continuarán los proyectos, para lo cual se tienen presupuestados casi dos mil millones de pesos.
Del impacto socioeconómico alcanzó a decir que se creó una gran cantidad de empleos en beneficio a cientos de familias fortaleciendo el tejido social.
El presidente Calderón Hinojosa ignoró la demanda del Metab para que la federación considere un programa para resarcir los 395 millones 300 mil pesos de daños, durante cuatro años, en esa zona por la construcción de la ventana de El Tintillo.
Esa cantidad, comparada con los nueve mil millones de pesos destinados al PHIT, representan apenas el 4 por ciento que fácilmente puede ser absorbido.
CONSECUENCIAS DRAMÁTICAS
En entrevista con Clip / Reporte Semanal, el coordinador estatal de METAB calificó de injusta las obras del PHIT que “salvan a la ciudad de Villahermosa, pero a la vez afectan a comunidades rurales, al desviar grandes volúmenes del río Grijalva a sus tierras, pastizales y cosechas”.
Por esa razón, el Movimiento Ecologista realizó un estudio sociológico que muestra la magnitud de los daños a 22 comunidades, entre las que se encuentran Barrancas y Guanal 1ª Sección, Tintillo, Barrancas y Guanal 2ª, González, José López Portillo, Aztlán 1ª, Corcho y Chilapilla, Aztlán 2ª, Aztlán 3ª, Aztlán 4ª, Aztlán 5ª, Cruz del Bajío, Corozal, El Pajonal, La Piedad, El Majagual, El Kuy, Boca de Aztlán, El Jahuacte, Palomillal, San Lorenzo, María de los Santos y Boca de Guanal.
De acuerdo al diagnóstico de METAB, “Estudio estadístico de afectaciones productivas y sociales de la zona Tintillo-Aztlanes”, son dramáticas las consecuencias de las afectaciones por las inundaciones anuales de 2008 a 2011.
Peor es —asienta Javier Torres Sánchez— la falta de interés e incapacidad gubernamental para realizar estudios que conozcan con precisión los daños de las obras hidráulicas conocidas como ventanas de alivio del Río Grijalva sobre predios y parcelas agrícolas y ganaderas.
En esta zona impactada, el Consejo Nacional de Población (Conapo) tiene consideradas a nueve comunidades como de Muy alta marginación y Alto rezago social con una población de mil 843 personas, de las cuales 948 son hombres y 895 son mujeres.
El INEGI reporta también que en esa zona se asienta una población de siete mil 488 habitantes, tres mil 809 hombres y tres mil 679 mujeres. De las mil 853 viviendas, mil 192 (el 64 por ciento) resienten daños severos.
De un muestreo de mil 873 familias se tiene que el 64 por ciento se dedicaba a la agricultura y el 36 por ciento a la ganadería.
Cuatrocientas familias encuestadas en 2010 habían perdido ocho mil 305 animales de traspatio. La pesca prácticamente ha desaparecido como consecuencia del pez Diablo.
De las siete mil cabezas de ganado que salieron de la zona de impacto, la mitad fue malvendida ante la imposibilidad de no poder pagar la pastura, lo que ha traído una descapitalización.
Por tal motivo, el METAB propuso el 16 de febrero a la Comisión Nacional del Agua, mediante la intervención de la Secretaría de Gobernación, un Programa de Atención Inmediata a las comunidades impactadas por las ventanas de alivio en la Zona del Tintillo-Aztlanes.
Javier Torres Sánchez informó que el delgado de Conagua en Tabasco, Jorge Octavio Mijangos, el responsable del Plan Hídrico, Parra Cota, el subsecretario de Gobierno Andrés Madrigal, la delegada de Sedesol, Gabriela Tello, y el representante del Instituto de Ingeniería de la UNAM revisaron el documento.
El METAB demanda la construcción de cuyos o terraplenes de media hectárea al nivel de la carretera o con una altura de 50 centímetros en zonas bajas para establecer casas-sombra, establos, granjas, tiendas, cibers, farmacias o papelería y la construcción de casas de palafito.
Requiere que se establezcan programas específicos para la recuperación de la producción agropecuaria en cuanto a maíz, plátano, chile habanero, ganado vacuno, paquetes avícolas, porcícolas, bovinos y de acuacultura.
Que se incorpore la engorda de búfalo de agua, en sustitución del ganado vacuno tradicional, por su adaptación al medio anegado, del que se aprovecha la leche y la carne que tiene 40 por ciento menos de colesterol, 55 por ciento menos de calorías, 11 por ciento más de proteínas y 10 por ciento más de minerales.
Y que se realicen estudios de suelo para detectar el porcentaje de plomo o azufre. La restauración ecológica se iniciaría con la técnica de estaqueo.
¿DE QUÉ VIVEN?
Para el Movimiento Ecológico de Tabasco, el canal que recién fue inaugurado enviará el caudal a más de cinco mil hectáreas, con esto se profundiza la destrucción de tierras agrícolas y ganaderas y la pobreza y marginación de las comunidades.
“Hasta el momento, los responsables de la construcción de esas obras no se han dignado a dar una alternativa de solución al problema social, al lado humano que no está considerado en ese Plan Hídrico, señala el coordinador estatal del METAB, Javier Torres Sánchez.
“Por tal motivo, la falta de un programa de reactivación económica está llevando a la población a su desplazamiento forzado, al abandono de su patrimonio, a volver a empezar y el gobierno federal y estatal deben preguntarse ¿de qué viven esas mil 873 familias?”, indica Torres Sánchez, quien afirma que su organización representa al 22 por ciento de esa población.
De acuerdo con el estudio de METAB, tan sólo por la ventana de El Tintillo, desde 2008 se ha registrado que en el cultivo de maíz en la ranchería homónima se han perdido 8 hectáreas; en Aztlán 1ª, 31; en Aztlán 2ª, 28; Aztlán 3ª, 4; Aztlán 4ª, 7; Aztlán 5ª, 37; López Portillo, 13; Corozal, 14; González, 22 y Matilla una hectárea, sumando un total de 165 hectáreas.
En cuanto a pastizales, en El Tintillo se han perdido 385 hectáreas; en Aztlán 1ª, 340; Aztlán 2ª, 523; Aztlán 3ª, 116; Aztlán 4ª, mil 12; Aztlán 5ª, 645; López Portillo, 119; Corozal, 157; González, 5 y Cruz del Bajío, 82; sumando tres mil 784 hectáreas.
Así se tiene un concentrado de pérdidas de 165 hectáreas de maíz; 178 hectáreas de plátano, 123 de chile habanero y las tres mil 784 has. de pastizales.
Reyes Torres señala que con esa información el gobierno federal los ha escuchado, sin embargo el gobierno estatal les impide participar en la mesa 3 que tiene como enlace con la federación,
“El hecho de que la CNDH haya emitido la recomendación 061/2011 y de que el titular de la Comisión Nacional del Agua, la rechazara, nos coloca en la posibilidad de tocar puertas en instancias internacionales”, dijo.
Ahora, insistió, están en espera de que el gobierno federal y el ayuntamiento de Centro asuman su responsabilidad para resarcir los daños a estas comunidades en lo que se señala en esa recomendación.
Por ejemplo, el METAB propone que para la reparación de lienzas se puede elaborar un programa de mil 86 empleos y otros mil 56 para la reparación de pastizales.
Torres Sánchez indicó que hasta el momento las autoridades federales y estatales no han desmentido el contenido del documento con que se soporta la demanda de reparación de daños y del programa de reactivación económica, al contrario, el Instituto de Ingeniería de la UNAM dio la razón al estudio.
El representante de esa organización no gubernamental informa que en este momento están en espera de que los tribunales, a través de sentencias, condenen a las dependencias responsables al pago de indemnizaciones económicas por los daños ocasionados a los particulares y ejidatarios por causa de las ventanas de alivio.
Señala que, aunque ya se firmó una minuta con la Comisión Nacional del Agua (Conagua), en caso de no cumplirse “llegaremos a instancias internacionales”.
“Tomando en cuenta que el Plan Hídrico Integral de Tabasco (PHIT) sigue avanzando, que esas comunidades continuarán con inundaciones, necesitamos prever que los habitantes no sigan sufriendo más perdidas por ese tipo de acciones, por el contrario exigimos la reactivación de su economía”, puntualiza Torres Sánchez.
El lunes 12 de marzo el presidente Felipe Calderón Hinojosa y el gobernador Andrés Granier Melo inauguraron otro cauce de alivio, el de Sabanilla, ubicado en la ranchería Torno Largo Tercera Sección.
Esta obra en la que se invirtieron más de 205 millones de pesos tiene el compromiso, asumido por la federación en 2008, de evitar que el río Grijalva se desborde sobre Villahermosa.
Por tres ocasiones, Calderón Hinojosa destacó que con esa otra obra se reducen los riesgos de inundación de centros habitacionales tan importantes como la capital tabasqueña.
“Sólo en los cauces de alivio y muros de protección, como parte del PHIT, se han invertido recursos sin precedentes por un monto de casi ocho mil millones de pesos”, informó.
Reiteró que la seguridad física y patrimonial de casi 600 mil tabasqueños ya está protegida contra las inundaciones y que a partir de 2012 se continuarán los proyectos, para lo cual se tienen presupuestados casi dos mil millones de pesos.
Del impacto socioeconómico alcanzó a decir que se creó una gran cantidad de empleos en beneficio a cientos de familias fortaleciendo el tejido social.
El presidente Calderón Hinojosa ignoró la demanda del Metab para que la federación considere un programa para resarcir los 395 millones 300 mil pesos de daños, durante cuatro años, en esa zona por la construcción de la ventana de El Tintillo.
Esa cantidad, comparada con los nueve mil millones de pesos destinados al PHIT, representan apenas el 4 por ciento que fácilmente puede ser absorbido.
CONSECUENCIAS DRAMÁTICAS
En entrevista con Clip / Reporte Semanal, el coordinador estatal de METAB calificó de injusta las obras del PHIT que “salvan a la ciudad de Villahermosa, pero a la vez afectan a comunidades rurales, al desviar grandes volúmenes del río Grijalva a sus tierras, pastizales y cosechas”.
Por esa razón, el Movimiento Ecologista realizó un estudio sociológico que muestra la magnitud de los daños a 22 comunidades, entre las que se encuentran Barrancas y Guanal 1ª Sección, Tintillo, Barrancas y Guanal 2ª, González, José López Portillo, Aztlán 1ª, Corcho y Chilapilla, Aztlán 2ª, Aztlán 3ª, Aztlán 4ª, Aztlán 5ª, Cruz del Bajío, Corozal, El Pajonal, La Piedad, El Majagual, El Kuy, Boca de Aztlán, El Jahuacte, Palomillal, San Lorenzo, María de los Santos y Boca de Guanal.
De acuerdo al diagnóstico de METAB, “Estudio estadístico de afectaciones productivas y sociales de la zona Tintillo-Aztlanes”, son dramáticas las consecuencias de las afectaciones por las inundaciones anuales de 2008 a 2011.
Peor es —asienta Javier Torres Sánchez— la falta de interés e incapacidad gubernamental para realizar estudios que conozcan con precisión los daños de las obras hidráulicas conocidas como ventanas de alivio del Río Grijalva sobre predios y parcelas agrícolas y ganaderas.
En esta zona impactada, el Consejo Nacional de Población (Conapo) tiene consideradas a nueve comunidades como de Muy alta marginación y Alto rezago social con una población de mil 843 personas, de las cuales 948 son hombres y 895 son mujeres.
El INEGI reporta también que en esa zona se asienta una población de siete mil 488 habitantes, tres mil 809 hombres y tres mil 679 mujeres. De las mil 853 viviendas, mil 192 (el 64 por ciento) resienten daños severos.
De un muestreo de mil 873 familias se tiene que el 64 por ciento se dedicaba a la agricultura y el 36 por ciento a la ganadería.
Cuatrocientas familias encuestadas en 2010 habían perdido ocho mil 305 animales de traspatio. La pesca prácticamente ha desaparecido como consecuencia del pez Diablo.
De las siete mil cabezas de ganado que salieron de la zona de impacto, la mitad fue malvendida ante la imposibilidad de no poder pagar la pastura, lo que ha traído una descapitalización.
Por tal motivo, el METAB propuso el 16 de febrero a la Comisión Nacional del Agua, mediante la intervención de la Secretaría de Gobernación, un Programa de Atención Inmediata a las comunidades impactadas por las ventanas de alivio en la Zona del Tintillo-Aztlanes.
Javier Torres Sánchez informó que el delgado de Conagua en Tabasco, Jorge Octavio Mijangos, el responsable del Plan Hídrico, Parra Cota, el subsecretario de Gobierno Andrés Madrigal, la delegada de Sedesol, Gabriela Tello, y el representante del Instituto de Ingeniería de la UNAM revisaron el documento.
El METAB demanda la construcción de cuyos o terraplenes de media hectárea al nivel de la carretera o con una altura de 50 centímetros en zonas bajas para establecer casas-sombra, establos, granjas, tiendas, cibers, farmacias o papelería y la construcción de casas de palafito.
Requiere que se establezcan programas específicos para la recuperación de la producción agropecuaria en cuanto a maíz, plátano, chile habanero, ganado vacuno, paquetes avícolas, porcícolas, bovinos y de acuacultura.
Que se incorpore la engorda de búfalo de agua, en sustitución del ganado vacuno tradicional, por su adaptación al medio anegado, del que se aprovecha la leche y la carne que tiene 40 por ciento menos de colesterol, 55 por ciento menos de calorías, 11 por ciento más de proteínas y 10 por ciento más de minerales.
Y que se realicen estudios de suelo para detectar el porcentaje de plomo o azufre. La restauración ecológica se iniciaría con la técnica de estaqueo.
¿DE QUÉ VIVEN?
Para el Movimiento Ecológico de Tabasco, el canal que recién fue inaugurado enviará el caudal a más de cinco mil hectáreas, con esto se profundiza la destrucción de tierras agrícolas y ganaderas y la pobreza y marginación de las comunidades.
“Hasta el momento, los responsables de la construcción de esas obras no se han dignado a dar una alternativa de solución al problema social, al lado humano que no está considerado en ese Plan Hídrico, señala el coordinador estatal del METAB, Javier Torres Sánchez.
“Por tal motivo, la falta de un programa de reactivación económica está llevando a la población a su desplazamiento forzado, al abandono de su patrimonio, a volver a empezar y el gobierno federal y estatal deben preguntarse ¿de qué viven esas mil 873 familias?”, indica Torres Sánchez, quien afirma que su organización representa al 22 por ciento de esa población.
De acuerdo con el estudio de METAB, tan sólo por la ventana de El Tintillo, desde 2008 se ha registrado que en el cultivo de maíz en la ranchería homónima se han perdido 8 hectáreas; en Aztlán 1ª, 31; en Aztlán 2ª, 28; Aztlán 3ª, 4; Aztlán 4ª, 7; Aztlán 5ª, 37; López Portillo, 13; Corozal, 14; González, 22 y Matilla una hectárea, sumando un total de 165 hectáreas.
En cuanto a pastizales, en El Tintillo se han perdido 385 hectáreas; en Aztlán 1ª, 340; Aztlán 2ª, 523; Aztlán 3ª, 116; Aztlán 4ª, mil 12; Aztlán 5ª, 645; López Portillo, 119; Corozal, 157; González, 5 y Cruz del Bajío, 82; sumando tres mil 784 hectáreas.
Así se tiene un concentrado de pérdidas de 165 hectáreas de maíz; 178 hectáreas de plátano, 123 de chile habanero y las tres mil 784 has. de pastizales.
Reyes Torres señala que con esa información el gobierno federal los ha escuchado, sin embargo el gobierno estatal les impide participar en la mesa 3 que tiene como enlace con la federación,
“El hecho de que la CNDH haya emitido la recomendación 061/2011 y de que el titular de la Comisión Nacional del Agua, la rechazara, nos coloca en la posibilidad de tocar puertas en instancias internacionales”, dijo.
Ahora, insistió, están en espera de que el gobierno federal y el ayuntamiento de Centro asuman su responsabilidad para resarcir los daños a estas comunidades en lo que se señala en esa recomendación.
Por ejemplo, el METAB propone que para la reparación de lienzas se puede elaborar un programa de mil 86 empleos y otros mil 56 para la reparación de pastizales.
Torres Sánchez indicó que hasta el momento las autoridades federales y estatales no han desmentido el contenido del documento con que se soporta la demanda de reparación de daños y del programa de reactivación económica, al contrario, el Instituto de Ingeniería de la UNAM dio la razón al estudio.
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