El secretario regional del CEN del PRI, Eugenio Hernández, “pariente del filósofo de Güemes”, tendrá que ir afinando, amarrando, haciendo los lazos y los nudos para que el proceso de selección del candidato a gobernador salga sin mayores complicaciones, opina el ex mandatario
Hombre pragmático, Enrique Priego Oropeza, no se complica la vida con el enredo que enfrenta hoy el Partido Revolucionario Institucional para definir a su candidato a gobernador de entre diez aspirantes a la nominación.
“Candidato sólo va a ser uno, ¡uno señores!”, sentencia quien fuera gobernador interino de Tabasco —por azares del destino— en 2001, a raíz de que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación anuló la elección del 15 de octubre de 2000.
—¿Cómo subsanar esos resentimientos que están presentes, que son una amenaza para el partido?
“¿Cómo se subsanan?”, repite la pregunta que le hace Clip / Reporte Semanal para conocer su opinión ante los visos de ruptura en torno al proceso de selección interna del PRI. Y tras una leve pausa, el ex mandatario estatal prosigue:
“Bueno, el pastel es muy grande y el pastel no es para uno, pero para eso hay acuerdos. El candidato a gobernador es uno, punto. De ahí empezamos a ver los compromisos, los acuerdos. Siempre los hemos visto en la política, no de ahora, desde tiempo atrás”.
—¿Qué espera un ex mandatario como usted del proceso que viene al interior de su partido para elegir al candidato a gobernador del PRI?
“Espero un proceso competido; creo que vamos a salir adelante. Pero antes, sí tengo que decir que se deben alcanzar acuerdos y eso compete a nuestro partido, para salir adelante y sacar la candidatura al gobierno”, expresa.
Añade que aun cuand
o algunas complicaciones se hacen presentes en el actual juego sucesorio priista, éstas no son cosa del otro mundo. “Siempre se han presentado a lo largo del tiempo; eso no es nuevo”, acota.
Enseguida, puntualiza: “Lo que tienen que entender los diez aspirantes que hasta ahorita han dicho que quieren competir, es que candidato sólo va a ser uno. ¡Señores, entiéndalo ya!, por favor; uno y ninguno más”.
Abunda: “a partir de eso, es que tenemos que ir poniéndonos de acuerdo para sacar al candidato que representará a mi partido en la elección, porque no podemos ir generando resentimientos, todos nos tenemos que sumar a quien vaya a ser el candidato”.
EL FINAL SE ACERCA YA…
—¿Usted ve en los aspirantes que, si no son, se sumen al acuerdo? Por ejemplo, Evaristo Hernández ha dicho que va hasta el final; Luis Felipe Graham igual; Gina y Pechel también, pero ¿hasta qué final?
El entrevistado observa fijamente a sus entrevistadores. Y expresa:
“No sé, no sé de qué ‘final’ hablan ellos. Esa es la función del partido, del delegado del partido; ahora, del Regional: de escucharlos, cuáles son sus proyectos, y que defina el Consejo Político cuál va a ser el método”.
Y luego se dirige a los aspirantes aludidos:
“Pero que sepan éstos, estos cuatro que me has mencionado, que solamente es uno, y que sepan también que nuestro partido siempre nos ha dado la oportunidad de participar en cargos públicos”.
Estas oportunidades se presentan unas veces y otras no. “Pero no por eso los vamos a relegar; es que no vamos a ser siempre priistas cuando nos da el partido, y vamos a dejar de serlo cuando el partido no nos da, y ‘eso’, como diría un ex gobernador al que yo quiero mucho —se refiere a Manuel Gurría Ordóñez—, pues no se vale”.
LA PUERTA ESTÁ ABIERTA
—¿Ve usted la posibilidad de que alguno de los diez salga del partido o hay suficiente oficio político con los nueve que, definitivamente, no van a ser?
Estima que “va a haber suficiente oficio político, pero yo lamentaría que se fueran; acuérdate que hay matrimonios que se separan. Si se quieren ir, la puerta está abierta para que se vayan, pero también para que regresen. Ya lo hemos visto antes”.
—¿Consideraría usted esto una traición, una deslealtad, ingratitud al partido tomando en cuenta que ya les dieron una o varias oportunidades en el pasado? —se le inquiere.
“Yo considero que deben analizarlo en su conciencia: qué les ha dado el partido. Porque no puede estarles dando todo el tiempo; que analicemos cuántos cargos han ocupado; también hay otros y otras que también tienen derecho y que jamás los han tomado en cuenta. Cito: Norma Campos, la esposa de Freddy Oropeza, la señora Gloria Herrera y otras más, para cargos no la toman en cuenta, porque aparecen otros”.
Extiende sus brazos, y añade: “Cuántas mujeres han militado en el partido, ven pasar y ven pasar y no se van, siguen en el partido”.
“Candidato sólo va a ser uno, ¡uno señores!”, sentencia quien fuera gobernador interino de Tabasco —por azares del destino— en 2001, a raíz de que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación anuló la elección del 15 de octubre de 2000.
—¿Cómo subsanar esos resentimientos que están presentes, que son una amenaza para el partido?
“¿Cómo se subsanan?”, repite la pregunta que le hace Clip / Reporte Semanal para conocer su opinión ante los visos de ruptura en torno al proceso de selección interna del PRI. Y tras una leve pausa, el ex mandatario estatal prosigue:
“Bueno, el pastel es muy grande y el pastel no es para uno, pero para eso hay acuerdos. El candidato a gobernador es uno, punto. De ahí empezamos a ver los compromisos, los acuerdos. Siempre los hemos visto en la política, no de ahora, desde tiempo atrás”.
—¿Qué espera un ex mandatario como usted del proceso que viene al interior de su partido para elegir al candidato a gobernador del PRI?
“Espero un proceso competido; creo que vamos a salir adelante. Pero antes, sí tengo que decir que se deben alcanzar acuerdos y eso compete a nuestro partido, para salir adelante y sacar la candidatura al gobierno”, expresa.
Añade que aun cuand
o algunas complicaciones se hacen presentes en el actual juego sucesorio priista, éstas no son cosa del otro mundo. “Siempre se han presentado a lo largo del tiempo; eso no es nuevo”, acota.Enseguida, puntualiza: “Lo que tienen que entender los diez aspirantes que hasta ahorita han dicho que quieren competir, es que candidato sólo va a ser uno. ¡Señores, entiéndalo ya!, por favor; uno y ninguno más”.
Abunda: “a partir de eso, es que tenemos que ir poniéndonos de acuerdo para sacar al candidato que representará a mi partido en la elección, porque no podemos ir generando resentimientos, todos nos tenemos que sumar a quien vaya a ser el candidato”.
EL FINAL SE ACERCA YA…
—¿Usted ve en los aspirantes que, si no son, se sumen al acuerdo? Por ejemplo, Evaristo Hernández ha dicho que va hasta el final; Luis Felipe Graham igual; Gina y Pechel también, pero ¿hasta qué final?
El entrevistado observa fijamente a sus entrevistadores. Y expresa:
“No sé, no sé de qué ‘final’ hablan ellos. Esa es la función del partido, del delegado del partido; ahora, del Regional: de escucharlos, cuáles son sus proyectos, y que defina el Consejo Político cuál va a ser el método”.
Y luego se dirige a los aspirantes aludidos:
“Pero que sepan éstos, estos cuatro que me has mencionado, que solamente es uno, y que sepan también que nuestro partido siempre nos ha dado la oportunidad de participar en cargos públicos”.
Estas oportunidades se presentan unas veces y otras no. “Pero no por eso los vamos a relegar; es que no vamos a ser siempre priistas cuando nos da el partido, y vamos a dejar de serlo cuando el partido no nos da, y ‘eso’, como diría un ex gobernador al que yo quiero mucho —se refiere a Manuel Gurría Ordóñez—, pues no se vale”.
LA PUERTA ESTÁ ABIERTA
—¿Ve usted la posibilidad de que alguno de los diez salga del partido o hay suficiente oficio político con los nueve que, definitivamente, no van a ser?
Estima que “va a haber suficiente oficio político, pero yo lamentaría que se fueran; acuérdate que hay matrimonios que se separan. Si se quieren ir, la puerta está abierta para que se vayan, pero también para que regresen. Ya lo hemos visto antes”.
—¿Consideraría usted esto una traición, una deslealtad, ingratitud al partido tomando en cuenta que ya les dieron una o varias oportunidades en el pasado? —se le inquiere.
“Yo considero que deben analizarlo en su conciencia: qué les ha dado el partido. Porque no puede estarles dando todo el tiempo; que analicemos cuántos cargos han ocupado; también hay otros y otras que también tienen derecho y que jamás los han tomado en cuenta. Cito: Norma Campos, la esposa de Freddy Oropeza, la señora Gloria Herrera y otras más, para cargos no la toman en cuenta, porque aparecen otros”.
Extiende sus brazos, y añade: “Cuántas mujeres han militado en el partido, ven pasar y ven pasar y no se van, siguen en el partido”.
PARIENTE DEL FILÓSOFO DE GÜEMES
—¿No haría usted un llamado al secretario Regional (Eugenio Hernández) para que aclarara paradas, en el sentido de que primero es el candidato presidencial y luego todo lo demás?
“Yo no le haría ningún llamado a Eugenio; fue compañero mío en la 58 Legislatura federal, un hombre muy experimentado, pariente del filósofo de Güemes, un hombre de cultura filosófica; creo que en su momento lo va a decir. Ese es su trabajo: ir afinando, ir amarrando, haciendo los
lazos, los nudos”, expone.
Sin embargo, ve complicada esa tarea. “Es un trabajo titánico que tiene que hacer la actual directiva del PRI y que no se duerman en sus laureles, porque hay que trabajar mucho, mucho, mucho… y se tiene que llegar a acuerdos, también a muchos acuerdos”, enfatiza.
—Dormirse en sus laureles, no alcanzar acuerdos, ¿sería un riesgo para el partido, de perder la elección?
“Miren, miren —dice—, los de enfrente y yo siempre lo he dicho, he sido muy respetuoso con el partido fuerte que es el PRD, lo respeto y tengo muchísimos amigos en el PRD, pero ellos ya traen lo suyo. Una de las más fuertes aspirantes: Rosalinda ya declinó, dice que a favor de su hermano Adán, ¿no? Ella ve según sus estudios que no está bien posicionada y declina a favor de su hermano; es lógico, es la sangre, pero no está haciendo nada indebido; ahí van entre Adán y Núñez para contender en el 2012 rumbo a la candidatura”.
CANDIDATOS AJENOS AL CRIMEN
—¿Cómo ve lo que está ocurriendo alrededor de este proceso? ¿No apoyaría un exhorto para que se hiciera una evaluación de confianza a todos los que aspiran?
Sin titubear, el también notario público, responde:
“Mira, yo tengo la convicción de que los aspirantes a puestos de elección popular del PAN, del PRD, del PRI van a ser candidatos ajenos a las actividades delictivas; ellos no se van a meter, ellos están en la política que es su actividad”.
“Aquí en Tabasco no están inmiscuidos (los miembros de organizaciones delictivas) en ningún partido y vamos a tener unas elecciones limpias, tranquilas que, además, ya las hemos tenido”, subraya.
Los problemas con la delincuencia organizada son de hace tres años que se han venido manifestando aquí en Tabasco, indica el ex gobernador, y expresa su confianza en que quienes pertenecen a estas bandas delictivas “ni se van a meter en las campañas políticas y los candidatos no están inmiscuidos en este problema”.
CONSEJO DE ‘VIEJO’
—¿Cómo siente usted a su partido, ante la opinión pública, ante los tabasqueños en general?¿Qué espera del PRI en 2012?
“Yo lo veo muy fuerte, está trabajando intensamente desde la anterior dirigencia, cuando estaba Adrián Hernández Balboa; el relevo fue otro joven que debo, como único consejo que le puedo dar, es que se reúna no sólo de los jóvenes sino de los viejos políticos que hay en el PRI y que no están siendo tomados en cuenta”, afirma.
Recuerda que en 2001 el PRI ganó fácilmente esa elección porque participaron los priistas tabasqueños, jóvenes y viejos, “viejos priistas que no fueron tomados mucho tiempo en cuenta y que ese fue el trabajo que se hizo dentro del partido”.
Resalta que ese fue uno de los consejos que dio a la dirigencia del tricolor y que ésta asumió plenamente. “Por eso el gran número de votantes”, resalta.
Hace un paréntesis para hablar de su gestión. “El pueblo de Tabasco —dice—, sin que sea falsa modestia, creyó en la palabra de Enrique Priego de que no iba a participar en esa elección y que el gobierno se iba a dedicar a su trabajo, cosa que hicimos a cabalidad”.
Y agrega: “Fueron 365 días donde el equipo que colaboró conmigo trabajó a conciencia y que hasta el día de hoy los que trabajaron conmigo y yo mismo no hemos sido cuestionados en el manejo de los recursos públicos del gobierno del estado”.
—¿No haría usted un llamado al secretario Regional (Eugenio Hernández) para que aclarara paradas, en el sentido de que primero es el candidato presidencial y luego todo lo demás?
“Yo no le haría ningún llamado a Eugenio; fue compañero mío en la 58 Legislatura federal, un hombre muy experimentado, pariente del filósofo de Güemes, un hombre de cultura filosófica; creo que en su momento lo va a decir. Ese es su trabajo: ir afinando, ir amarrando, haciendo los
lazos, los nudos”, expone.Sin embargo, ve complicada esa tarea. “Es un trabajo titánico que tiene que hacer la actual directiva del PRI y que no se duerman en sus laureles, porque hay que trabajar mucho, mucho, mucho… y se tiene que llegar a acuerdos, también a muchos acuerdos”, enfatiza.
—Dormirse en sus laureles, no alcanzar acuerdos, ¿sería un riesgo para el partido, de perder la elección?
“Miren, miren —dice—, los de enfrente y yo siempre lo he dicho, he sido muy respetuoso con el partido fuerte que es el PRD, lo respeto y tengo muchísimos amigos en el PRD, pero ellos ya traen lo suyo. Una de las más fuertes aspirantes: Rosalinda ya declinó, dice que a favor de su hermano Adán, ¿no? Ella ve según sus estudios que no está bien posicionada y declina a favor de su hermano; es lógico, es la sangre, pero no está haciendo nada indebido; ahí van entre Adán y Núñez para contender en el 2012 rumbo a la candidatura”.
CANDIDATOS AJENOS AL CRIMEN
—¿Cómo ve lo que está ocurriendo alrededor de este proceso? ¿No apoyaría un exhorto para que se hiciera una evaluación de confianza a todos los que aspiran?
Sin titubear, el también notario público, responde:
“Mira, yo tengo la convicción de que los aspirantes a puestos de elección popular del PAN, del PRD, del PRI van a ser candidatos ajenos a las actividades delictivas; ellos no se van a meter, ellos están en la política que es su actividad”.
“Aquí en Tabasco no están inmiscuidos (los miembros de organizaciones delictivas) en ningún partido y vamos a tener unas elecciones limpias, tranquilas que, además, ya las hemos tenido”, subraya.
Los problemas con la delincuencia organizada son de hace tres años que se han venido manifestando aquí en Tabasco, indica el ex gobernador, y expresa su confianza en que quienes pertenecen a estas bandas delictivas “ni se van a meter en las campañas políticas y los candidatos no están inmiscuidos en este problema”.
CONSEJO DE ‘VIEJO’
—¿Cómo siente usted a su partido, ante la opinión pública, ante los tabasqueños en general?¿Qué espera del PRI en 2012?
“Yo lo veo muy fuerte, está trabajando intensamente desde la anterior dirigencia, cuando estaba Adrián Hernández Balboa; el relevo fue otro joven que debo, como único consejo que le puedo dar, es que se reúna no sólo de los jóvenes sino de los viejos políticos que hay en el PRI y que no están siendo tomados en cuenta”, afirma.
Recuerda que en 2001 el PRI ganó fácilmente esa elección porque participaron los priistas tabasqueños, jóvenes y viejos, “viejos priistas que no fueron tomados mucho tiempo en cuenta y que ese fue el trabajo que se hizo dentro del partido”.
Resalta que ese fue uno de los consejos que dio a la dirigencia del tricolor y que ésta asumió plenamente. “Por eso el gran número de votantes”, resalta.
Hace un paréntesis para hablar de su gestión. “El pueblo de Tabasco —dice—, sin que sea falsa modestia, creyó en la palabra de Enrique Priego de que no iba a participar en esa elección y que el gobierno se iba a dedicar a su trabajo, cosa que hicimos a cabalidad”.
Y agrega: “Fueron 365 días donde el equipo que colaboró conmigo trabajó a conciencia y que hasta el día de hoy los que trabajaron conmigo y yo mismo no hemos sido cuestionados en el manejo de los recursos públicos del gobierno del estado”.
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