Entrevista con Arturo Cadena Hernández, Director General de la empresa especializada en distribución de válvulas de primer nivel
Redacción / clip.redaccion@gmail.com
—¿Nos puede dar una introducción sobre el desarrollo de CAHDEZ?
—La empresa fue fundada en 1999 para aprovechar la oportunidad de ofrecer mejoras operativas a la industria petrolera, específicamente en el sector de transporte de hidrocarburos marino y terrestre. Observamos anomalías, tales como frecuentes paros en la producción y demasiadas libranzas muy costosas para Pemex; después de un análisis comparativo de la operación petrolera en otros países, identificamos que el mayor problema eran las válvulas.
“En muchas áreas Pemex tradicionalmente ha utilizado válvulas con sellos blandos que no soportan las condiciones de operación y omite considerar válvulas con sellos metal-metal, secundarios y en particular los de tipo multipunto, esto ha provocado altísimos costos para lograr cumplir con los programas productivos. Ineludiblemente se necesitaba de una tecnología de mayor nivel que resolviera estos problemas y además redujera los costos de operación.
“Al ver esa oportunidad empezamos a trabajar con la filosofía de proponer válvulas de primer nivel, que estaban y siguen utilizándose hoy en día en países de renombre en la industria petrolera, tales como Arabia Saudita, EUA, Brasil, entre otros. Las grandes ventajas de estas válvulas son indiscutiblemente una vida útil muy larga —de 30 a 40 años— y una calidad que libera al usuario del deber de mantenerlas o repararlas.
“El problema tradicional de Pemex es que a la fecha todavía siguen trabajando con válvulas mal seleccionadas y por tal razón terminan siendo defectuosas y desechables; consideramos que la causa permanece presente por lo enorme que es la organización y en consecuencia les ha resultado difícil parar esta inercia”.
—¿Cómo se convence a Pemex de la necesidad de utilizar productos de primer nivel?
—Nos hemos abocado a la tarea de difundir los criterios que se deben aplicar. Hemos organizado más de 45 seminarios, muchos de ellos con el apoyo del Instituto Mexicano del Petróleo (IMP). Durante el desarrollo de los mismos los ingenieros de Pemex se convencen de que pueden mejorar mucho y que a través del entendimiento de las prácticas de las empresas internacionales podrán ahorrar dinero y empezar a trabajar más eficientemente.
“A base de muchos análisis de costo-beneficio estamos mostrando que aunque las válvulas de primera clase requieren una inversión mayor, en el largo plazo hacen que las operaciones productivas sean más económicas y además evitan muchos problemas operativos innecesarios”.
—¿Cuál es el perfil deseado de las empresas que representan?
—Trabajamos con fabricantes de válvulas para aplicación en instalaciones superficiales y submarinas, que son líderes a nivel mundial. Fomentamos trabajar con las mejores empresas porque de esta manera aseguramos la calidad de las válvulas que ofrecemos y cumplimos con los requisitos para su aplicación. En este momento estamos representando empresas internacionales, pero al mismo tiempo aprendiendo de ellas; nuestra visión para el corto plazo es disponer de las condiciones tecnológicas adecuadas que nos permitan realizar nuestra propia fabricación en México.
—Hay bastantes empresas vendiendo válvulas a Pemex. ¿Cómo ven la competencia en el sector?
—La mayor competencia proviene de China. Hay muchas empresas que ofrecen atractivos plazos crediticios, bajos precios y altos inventarios de productos en serie, penetrando al mercado mexicano a través de fabricantes nacionales que asignan su marca a los productos chinos. Nuestras observaciones concluyen que las válvulas que vienen de este país no cumplen con la calidad requerida y en la mayoría de los casos están fallando, propiciando altos riesgos operativos.
—¿Cuál es el perfil de sus clientes?
—Nuestro cliente principal es Pemex y le proponemos nuestros servicios y productos a través de diferentes contratistas. Algunos ejemplos incluyen a empresas con un alto nivel de responsabilidad como son ICACSA y DMGP, entre otras. Consideramos que el mayor desafío de trabajar con los demás contratistas tradicionales son las condiciones crediticias que ellos manejan, y que fomentan un mercado con productos de imitación.
“Hay casos donde las empresas chinas pueden cotizar un precio hasta un 30% menos, ofreciendo la imitación de una válvula de calidad reconocida. Éste es un margen contra el cual nosotros no podemos competir. Estamos esperando que Pemex despierte y se dé cuenta de que aunque es más caro inicialmente, en el largo plazo nuestro modelo de trabajo le va a ahorrar mucho dinero y muchos problemas”.
—¿Qué opinan sobre la importancia de Tabasco para la industria petrolera?
—Tradicionalmente Tabasco ha tenido bastante importancia en la industria. Actualmente la región está creciendo en la producción de hidrocarburos y todavía hay campos que no han sido explotados. En nuestra opinión Tabasco es el área que tiene mayor potencial petrolero en México.
—¿Cómo ven el desarrollo de la empresa dentro de los próximos 3 - 5 años?
—Vemos un crecimiento muy positivo. Esperamos que muy pronto nuestros clientes se den cuenta de que pagar por calidad es lo mejor que pueden hacer para la eficiencia de sus operaciones.
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